Este próximo 15 de junio se celebra en los montes cercanos a la capital alavesa la bien denominada prueba de fondo de los Montes de Vitoria. Esta conocida carrera, por lo menos en lo que a Euskadi y alrededores se refiere, afronta ya su duodécima edición y como siempre viene avalada por la organización de la Sociedad Excursionista Manuel Iradier -con el apoyo de la Fundación Vital y la colaboración de DIARIO NOTICIAS DEÁLAVA-, que de esto sabe un rato ya que a sus espaldas tiene también la responsabilidad de pruebas como la Vitoria-Estibaliz o, por citar la más famosa de todas, la grandiosa, en todos los sentidos, Hiru Haundiak.
Ya desde muy temprano el sábado, en los aledaños del campo de fútbol de Mendizorroza, se concentrarán los 1.113 participantes para tomar los autobuses, puestos por la organización, que les trasladarán a la línea de salida de Ullibarri-Jauregui, donde puntualmente, a las seis de la mañana, dará comienzo esta duodécima edición de los Montes de Vitoria. El primer monte en coronarse será Itxogana, al cual se llegará en el kilómetro 5,5, después de dos kilómetros iniciales muy cómodos para afrontar lo más complicado de la subida en los tres y medio restantes, ya con las primeras luces del amanecer. Posteriormente, después de un pequeño descenso, casi sin descanso, al pasar por la modesta cima de Elabe los corredores tendrán un kilómetro duro antes de llegar a la segunda cima, Indiagana. A partir de ahí una pista muy corrible, perfecta para soltar piernas les llevara al pueblo de Azáceta, en el noveno kilómetro y primer avituallamiento de la carrera.
Una vez repuestos de agua, los corredores abandonarán Azáceta para después de una cómoda subida alcanzar la tercera cima, Arraialde. A partir de aquí la carrera afronta un largo descenso de casi ocho kilómetros, con algún repecho eso sí, pasando primero por la desconocida cima de Lete y después por un par de bosques, donde el terreno seguro que se presenta, a pesar de estar en el mes de junio, resbaladizo y con cierta dificultad para mantener la verticalidad en algún tramo. Al final espera la balsa de Ixona, lugar donde estará situado el siguiente avituallamiento, este ya con algo de sólido en el kilómetro 19. Saldrán de Ixona, para afrontar la que a mi parecer es una de las subidas más duras de la carrera, el ascenso al Almurrain. Son solamente 800 metros de cuesta, pero, junto con el ascenso a Busto, la de mayor porcentaje en cuanto a desnivel salvado.
A continuación toca la aproximación al techo de la prueba, que nos es otro que la cima del Kapildui. Hasta allí les llevaran seis kilómetros de prácticamente todo subida, con algún tramo para recuperar, así como el tercer avituallamiento situado en el kilómetro 26, justo antes de los dos últimos kilómetros previos a alcanzar finalmente la cima. Otros años el avituallamiento estaba después de coronar, pero esta edición se ha puesto antes, seguramente, ya que se trata de una de las subidas más largas, por establecer más homogeneidad en cuanto a la separación de los avituallamientos y de poder reponer líquidos, sobre todo teniendo en cuenta el calor que hizo en la anterior edición. Pasado el control de cima y de pasar por el buzón de Butxisolo, bajarán todos los participantes a la localidad de Okina, donde está, además de la mitad de la carrera, mucha gente siguiendo la prueba y por supuesto no podemos olvidarnos del avituallamiento más importante de la misma.
Ya estamos en el kilómetro 31 y se puede decir que superada la dura y exigente subida a Zalbizkar, hasta llegar a la base de Lendiz, estamos ante un terreno en el que, si hemos sido capaces de guardar fuerzas, poder ganar tiempo, ya que se presta al trote. También se disfruta de unos de los tramos más vistosos en cuanto a paisajes y bosques por lo que se pasará. Ya en esta parte queda la subida a Lendiz para llegar arriba justo en el kilómetro 42. Un par de kilómetros más tarde, en el puerto de Vitoria, llegaremos a un nuevo avituallamiento.
Aquí comienza la tercera y última parte de la carrera, donde se encuentran zonas que serán más conocidas para los corredores, ya que al estar cerca de Vitoria se prestan más al entreno por ellas. Pero no hay que confiarse ya que ya se lleva más de una maratón en las piernas y quedan subidas duras como las de Arrieta y Zaldiaran. Habrá que tener cuidado con el calor, a pesar que las previsiones no lo dan, porque muchos pasarán por aquí a las horas centrales del día. Entre medias de las dos cimas, estará otro avituallamiento, justo en la carretera del puerto de Zaldiaran.
Llegados allí, justo después de un kilómetro de bajada se encara la ya anunciada previamente como dura subida a Busto. Son solo 500 metros, pero presenta, al igual que la subida al Almurrain, los mayores porcentajes de desnivel, a lo que hay que sumar que encima ya es el kilómetro 52. Quedan diez para la meta y entre medias tan solo nos queda la corta subida al castillo de Eskibel. Posteriormente, bajada rápida y complicada en algunos tramos hasta el pueblo, donde estará el último avituallamiento antes de meta. Si nos quedan fuerzas podremos apretar hasta meta por terreno favorable por el bosque de Armentia y la bajada del Santo, ya en la ciudad de Vitoria. La meta estará situada, como en otras ediciones en el Estadio.
Cabe destacar que a pesar que la mitad de los participantes son de la provincia de Álava, también hay corredores de fuera, los más numerosos vizcaínos y guipuzcoanos, pero incluso de Salamanca o Castellón, así como de Estados Unidos o Italia. Las chicas en este caso serán más del 14 %, un dato muy importante. Entre las favoritas a la victoria estarán Josune Hernández y Beatriz Villegas, primera y tercera de la anterior edición, así como Andrea Garai. Los chicos, por su parte, tendrán nombres a seguir como el de Álvaro Ramos, ganador de la Nafarroa Xtrem, Inaxio Sánchez e Ibon Urrutiabeaskoa, con buenos puestos hace dos años; y la terna formada por Aitzol Jiménez, Adrián Sáez de Arregi y Ander Erize.
Tan solo me queda desear suerte a todos los que vayan a participar, darles mi más sincera enhorabuena ya solo por el hecho de ponerse en la línea de salida de una prueba tan exigente. Lo duro de esto no es el día de la carrera sino todos los entrenamientos anteriores a ese momento, Ahora toca disfrutar, en la medida de lo posible, de la XII Montes de Vitoria. A mi este año, por compromisos familiares, me toca vivirla desde fuera. Tendré que esperar a 2021 para poder vivirla de nuevo desde dentro.
Si quieres que tu prueba aparezca en esta sección, puedes ponerte en contacto conmigo en hoycorremos@noticiasdealava.eus
Sábado 15 de junio
Recogida dorsales4.45-5.20
Salida autobuses5.20
Salida carrera6.00
Tiempo corte (km. 31)12.40
Llegada meta estimada11.40-12.10
Tope llegada20.00
Entrega bolsa corredor A la llegada en la meta