q uién te enseña a retirarte? ¿Qué se siente cuando llevas toda una vida haciendo algo y ese algo se termina? ¿Qué pasa por tu cabeza cuando tu cuerpo te dice que no puedes seguir?
“Liberación, porque ha sido un año muy largo, haciendo todo lo posible por volver a jugar, pero después de tanto intentarlo no pudimos darle vuelta. Hace unas semanas lo decidí y ahora me veo liberado, ya veremos cómo me encontraré en unas semanas”, relataba Gaizka Toquero el otro día en una entrevista.
Esto lo he hablado muchas veces con los amigos. Esa sensación que tienes cuando mentalmente estás mejor que nunca. Cuando ves e intuyes tu deporte de forma más clara en que lo has leído jamás. Sin embargo, tu cuerpo no te sigue. A balones que antes llegabas, ahora no llegas. A situaciones en las que antaño superabas a tu rival, ahora no te vas ni de un abuelito. Tu cuerpo te ha abandonado. Ha dicho basta. Te ha hecho un guiño cómplice indicando que te eches a un lado. Igual llevas unos años intuyendo que el final se acerca, pero no quieres verlo. Es posible que hayas imaginado como te gustaría finalizar tu carrera. Qué personas quieres que te acompañen en ese último partido, en esa última competición. Finalizarlo como una fiesta, compitiendo. Sintiéndote útil y valioso. Dejando TÚ a tu deporte y no que él te deje a ti. Con la idea de recordar ese día como un pequeño homenaje que te haces a ti mismo por el esfuerzo y dedicación de los años jugando, compitiendo, disfrutando.
Pero muchas, muchísimas veces esto no es así. Juegas tu último partido y ya está. Corres, saltas, compites por última vez y ya está. Eso si sucede así. A lo mejor jugaste tu último partido y ni siquiera lo sabías. Competiste por última vez y no fuiste consciente de ello. Pues eso fue todo amigo. Aquí se termino.
Y, ¿ahora qué? ¿Qué se hace ahora? Hay muchos deportistas que se han formado durante sus carreras y al finalizarlas desean seguir vinculados a eso que han estudiado. Otros muchos no han hecho nada. Posiblemente han creído (y les hemos alimentado) que con eso que hacían tan bien les iba a valer para toda la vida. A unos y a otros les une algo en común. Durante mucho tiempo, años, han hecho algo de forma rutinaria. ENTRENAR. Dedicarse a su deporte conlleva horas al día de preparación. Rutinas. Comidas prohibidas. Celebraciones festejadas a distancia. Veranos incompletos. Concentraciones.
Solemos justificarlo con que se dedican a lo que les gusta y además ganan mucho dinero.
En referencia a lo primero, el disfrute, me encantaría que leyerais Open de Andre Agassi. Que descubrierais cómo se sentía desde bien pequeñito y cómo llegó a aborrecer su deporte y lo que circula alrededor del deporte.
Con respecto a lo segundo, ¿cuántos creéis que ganan lo suficiente para poder vivir a lo largo de su vida? Tania Lamarca logró el mayor éxito al que puede aspirar un deportista, ganar una medalla olímpica y sigue teniendo que currarse su vida. Horas y horas de dedicación. A ella sí le apasionaba lo que hacia pero con 17 años te dicen que ya no vales, ¿cómo se maneja eso? Que más da, tienes una medalla olímpica, ¿no?
Tanto a Gaizka como a Tania nadie les enseñó lo que había después. Es posible que se lo contaran y que hayan visto a compañeros pasar por lo mismo antes que ellos pero lo que no sabían es que eso hay que SENTIRLO, VIVIRLO y EXPERIMENTARLO. De la misma forma que cuando se nos va un ser querido, aunque sepamos que esto va a ocurrir en nuestra vida, nadie nos ha enseñado qué es lo que hay que hacer.
¿Cómo se vive esa situación? ¿Qué se hace ahora? Nada. Se vive y ya está. Se siente. Se experimenta. Y te toca a ti. A ti solo vivirlo. Puede que tengas personas a tu alrededor para sobrellevarlo y para que puedan apoyarte pero hay una parte que solo la vas a vivir tú. Tú y tus recuerdos. Os conozco a los dos Tania y Gaizka, Toquero y Lamarca, y, para mí, sois dos ejemplos. Ejemplos de cómo habéis vivido vuestra vida deportiva. Con pasión, con esfuerzo, con dedicación y así os voy a recordar en el tapiz y en el campo. Y ahora lo que viene, ni mejor ni peor, diferente. Conociéndoos sé que va a ser de la misma forma. Te abandona tu cuerpo pero no lo mas valioso, tu alma, tu SOUL y lo que tú eres por encima de todo. Thanks.