Real Madrid92
Barcelona65
REAL MADRID Llull (6), Causeur (5), Deck (9), Randolph (16), Ayón (2), -quinteto inicial-, Campazzo (7), Tavares (12), Taylor (3), Carroll (15) y Thompkins (17).
BARCELONA Heurtel (16), Hanga (8), Claver (8), Singleton, Tomic (6) -quinteto inicial-, Pangos (11), Blazic, Smits (2), Pustovyi (4), Oriola (5) y Kuric (5).
Parciales 22-17, 31-13, 16-20 y 23-15.
Árbitros Belosevic, Lottermoser y Silva. Sin eliminados.
Pabellón WiZink Center. 11.953 espectadores.madrid - El Real Madrid consiguió una amplia victoria ante el Barcelona, que se fraguó en un segundo cuarto de película, con un parcial de 31-13 que abrió de par en par las puertas del triunfo y acabó con las esperanzas de los azulgranas. El Clásico comenzó a notarse en el salto inicial, en el que Tomic acabó sentado en el suelo tras pelear el balón con el hispano-mexicano Ayón.
De todas formas comenzó mejor el Barcelona con una defensa pegajosa y efectiva, tanto en zona como en individual, que obligó al Real Madrid a ir ajustando su ataque. La buena mano de Randolph, autor de trece puntos, fue lo que salvó al Real Madrid en este primer cuarto.
En el segundo cuarto el cuadro local destapó el frasco de las esencias y consiguió un parcial de 31-13 que habla por si solo. Jaycee Carroll recogió el testigo de Randolph y anotó 15 puntos. Pero lo que de verdad catapultó al Madrid fue la defensa que maniató a un Barcelona incapaz de reaccionar. La guinda al periodo fue el triple de Campazzo desde su zona en el último suspiro y que subió el 53-30 al marcador.
La diferencia de 23 puntos al descanso marcó el resto del duelo. El Barcelona intentó buscar algún resquicio para entrar en el partido e incluso consiguió un parcial de 0-10 en el tercer cuarto, del 64-37 al 64-47, pero el Madrid, aunque bajó sus prestaciones con respecto al segundo cuarto, no se lo permitió.
El 69-50 con el que acabó el tercer cuarto dejó las cosas prácticamente vistas para sentencia. El Barcelona luchó por no salir tocado del clásico europeo y dejó claro que su nefasto segundo cuarto fue un gran error de bulto. El Madrid mordió el cuello del rival y no soltó la presa, aunque la falta de tensión en los últimos minutos le llevara a cometer errores impropios en los minutos finales y perder algo de su notable renta. - Efe