Bilbao - Mikel Urrutikoetxea jugará esta temporada el Masters de Baiona de trinkete. El manista de Zaratamo tomará el mismo camino que Oinatz Bengoetxea, el curso pasado, Juan Martínez de Irujo, que llegó a proclamarse campeón en 2015, o Titín III. El vizcaino encontrará nuevas fronteras en una modalidad desconocida, que se presentará el martes en la localidad lapurtarra. En el trinkete Moderno, una cancha rodeada de paredes de cristal, estarán presentes los mejores del mundo de la especialidad. El puntillero habitará en una de las competiciones estivales con mayor tirón al otro lado del Bidasoa, pero tomará un rol distinto. Urrutikoetxea jugará de zaguero con un delantero por determinar, que se presupone de primera fila. Por ejemplo, Bengoetxea VI se unió a Battitta Ducassou, uno de los primeros espadas, e Irujo triunfó con Larralde.
El vizcaíno se ejercitó ayer a las órdenes de Panpi Ladutxe en el Moderno junto a, entre otros, Ducassou y Ospital. “Es una experiencia nueva para mí. Se me hizo raro el primer ensayo, como es normal. Estuve entrenando con profesionales del trinkete, que están todo el año compitiendo, y es complicado”, determina el puntillero vizcaino, quien revela que “al principio, al no estar acostumbrado, se me hizo extraño, pero poco a poco me fui encontrando más cómodo en el peloteo”.
A juicio del zaratamoztarra, la mayor diferencia a la hora de jugar se encuentra en las particularidades del propio escenario: una jungla de cristal con tejadillo. “No estamos acostumbrados a meter la pelota en la red, rebotear o que haya botes en la tabla. Después, estás rodeado de paredes y el cuero suele venir tocado. Son modalidades muy diferentes”, manifiesta el delantero de Asegarce, que entrará en juego el próximo 25 de julio. “Quieras o no, siempre tienes que estar pendiente de la pelota y de los extraños que que va a hacer. Tienes que estar concentrado en cuándo entrar de aire, cuándo va a caer...”, analiza Urrutikoetxea, quien afirma que “el material es bastante más ligero. No tiene nada que ver con el nuestro. La pelota de pared izquierda es dura y anda fuerte por abajo, tira mucho. La de trinkete es más ligera, con tendencia a coger más bote y no corre tanto por el suelo. Al ser saque libre, te pueden hacer mucho daño, pero todo es acostumbrarse”.
Así las cosas, el de Zaratamo cuenta que “es ilusionante y bonito a la vez”. “Nunca he jugado a trinkete y sé que me va a costar adaptarme. Intentaré amoldarme lo mejor y dar la mejor imagen”, desbroza el manista. Por trabajo no será. Entrenó ayer y volverá el viernes. “Tengo que dar las gracias a los pelotaris que me están ayudando y a Panpi Ladutxe, que dirigió el ensayo. De sus consejos siempre se aprende”, finaliza Urrutikoetxea.
Lesión de Jaka Por otro lado, Erik Jaka sufre una rotura muscular de grado II en el dorsal ancho derecho, confirmada tras las pruebas realizadas ayer. No hay plazos de recuperación.