parís - A medida del tamaño del personaje y de la grandilocuencia de su palmarés: cuatro Tours, un Giro y una Vuelta. Así es la ingente cantidad de documentación que ha presentado Chris Froome para defenderse ante la Unión Ciclista Internacional por el positivo de salbutamol detectado en la Vuelta a España al ciclista británico. La enorme defensa, una torre de datos y pruebas, imposibilita, según David Lappartient, presidente del organismo rector del ciclismo mundial, que el caso Froome se resuelva antes del comienzo del Tour de Francia, el próximo 7 de julio. “No es laxitud, cuando hay 1.500 folios de informes... debes analizar todo y lleva tiempo”, aseguró a Le Parisien David Lappartient para defender la demora de la resolución. Froome anunció que estaría en la salida de la carrera francesa después de hacerse con el Giro.
El británico siempre ha ondeado la bandera de su inocencia y la maquinaria del Sky, con un nutrido grupo de abogados y expertos, además de todos los medios posibles, arropa sin fisuras a su estrella. La batalla legal, por tanto, parece estar lejos de resolverse debido a los recovecos que presenta el caso, si bien en capítulos similares, la resolución de la UCI no se demoró tanto. “El caso es mucho más complejo que otros, y quizá Froome tiene más medios para demostrar la complejidad con precisión, donde otros podrían haber abdicado por no llevar a cabo procedimientos más engorrosos. Mi deseo siempre fue que estuviese juzgado antes del Giro, pero no fue así. Ahora me gustaría que se resolviese antes del Tour... bueno, debo ser realista, creo que no se resolverá a tiempo”, explicó Lappartient sobre un caso que sombrea la credibilidad del ciclismo.