bilbao - Fue un día en el que nada salió. No hubo excusa. Danel Elezkano y Beñat Rezusta fueron claramente dominados por Joseba Ezkurdia y José Javier Zabaleta. Ver cómo la opción de conseguir la txapela escapaba fue un mazazo enorme, pero no haber dado su mejor nivel provocó que acabaran con un peor sabor de boca. La derrota fue clara, tanto en el abultado marcador de 22-9 como en las sensaciones y los dos pelotaris dejaron claro que no habían estado a la altura. El de Zaratamo no pudo poner la guinda a un campeonato sobresaliente con su primer título en la élite. Ayer solo hubo tristeza, pero Elezkano II apostó por tomarse las cosas más en frío y valorar de forma positiva el gran paso realizado y el hecho de haber llegado a una final que cuando comenzó el campeonato parecía algo tremendamente complicado.

La final fue un premio para Danel Elezkano y Beñat Rezusta. El estreno para el primero de ellos en una cita de este calado, la oportunidad de conseguir su segunda txapela para el otro. La recompensa a un campeonato en el que comenzaron mandando con mano de hierro y dieron otro paso más tras sobrevivir a unas duras semifinales. “Una vez estando aquí a todos nos gusta ganar, lo malo sería que no me fuera triste a casa. Pero cuando veamos en frío el campeonato que hemos hecho, tendremos motivos también para estar un poco más contentos. Cuando empezó el campeonato, hubiéramos firmado estar aquí”, subrayó Elezkano II. Sin embargo, el buen trabajo realizado con anterioridad no consoló de momento al delantero vizcaíno: “Es una pena no haber podido dar nuestro nivel hoy. Más que perder, la pena es no haber hecho nuestro partido. Ellos han sido superiores desde el principio hasta el final y han ganado con todo merecimiento”.

La diferencia entre las dos parejas fue evidente desde el arranque del partido. Ezkurdia y Zabaleta tuvieron una marcha más, estuvieron a un nivel descomunal en todas las facetas y los azules solo pudieron defenderse ligeramente ante el ataque constante al que fueron sometidos. “Teníamos claro que empezar bien era muy importante, calentar lo mejor posible. Creo que hemos salido bien a la cancha, pero para cuando nos hemos dado cuenta íbamos perdiendo por muchos tantos y cuando te cogen tanta diferencia es difícil. Ellos han jugado bien y han controlado el marcador”, declaró el zaratamoztarra. El partido se fue rápido hasta el 18-4. Sin embargo, el orgullo pudo más que la razón. Elezkano II y Rezusta apretaron hasta el final y trataron de revertir la situación. “Hemos seguido luchando hasta el final, como todo el campeonato. Ha habido muchos partidos en los que hemos ido por detrás y no hemos tirado la toalla en ningún encuentro y en la final tampoco lo íbamos a hacer”, comentó Elezkano. Aunque ese esfuerzo no sirvió y Ezkurdia y Zabaleta mantuvieron todo bajo control para cerrar el partido.

FALTA DE CONFIANZA Rezusta entonó el mea culpa. El zaguero de Bergara tuvo uno de sus peores partidos en este campeonato y eso le llevó a perder demasiadas pelotas, estando también completamente dominado durante gran parte de choque: “El partido ha sido duro por el marcador y las sensaciones. En ningún momento me he visto capaz de pasar a dominar, bastante he tenido con intentar no fallar. Todo el partido incómodo, dominado y así es imposible”.

El guipuzcoano llegó a la final con dudas en la mano, pero dejó claro que esas molestias no eran excusa: “El problema es la falta de confianza. Si tuviera la mano mal, me quedaría en casa porque sería una falta de respeto venir al frontón teniendo la mano mal y eso no lo haría en ningún momento”.