- El encuentro que se celebra el próximo sábado en el frontón Bizkaia de Bilbao continúa mediatizado por la incertidumbre sobre la presencia de Andoni Aretxabaleta en la contienda. El zaguero de Markina, que está actuando en el Parejas junto a Mikel Urrutikoetxea como suplente del lesionado Ladis Galarza, no se ejercitó ayer en la elección de material de la cancha de Miribilla. Así, el guardaespaldas no disipó las dudas sobre el estado de su mano derecha, que acabó muy golpeada en la cuarta jornada de la competición en el Ederrena de Urretxu. El ensayo definitivo lo realizará hoy en el escenario bilbaíno para tomar la decisión de si participará en el encuentro. “Si no estoy bien, no voy a salir”, manifestó el vizcaíno.

“Sigo en duda porque no he hecho una prueba decente. Quiero dar un día más de descanso a la mano porque hoy -por ayer- voy a tomar masaje”, argumentó el markinarra en las entrañas del Bizkaia. Tiene previsto que no será “muy extensa”. “Simplemente se trata de valorar las sensaciones y darle más duro a la pelota. Esta semana he golpeado, pero no muy fuerte porque no tenía buenas sensaciones con el material que he probado. Quiero intentarlo con otros tacos, de otro modo”, recitó el zaguero, quien acumula experiencia con el mal de manos. “Estoy haciendo todo lo posible”, añadió.

El problema llegó en Urretxu. “Hice tacos nuevos y los puse demasiado blandos. A mitad de partido me entró una pelota y me pasé el resto del partido empujando. Si no encuentro lo que quiero, no jugaré, porque es una falta de respeto a la gente y a mí mismo”, contó el zaguero. “Estoy tranquilo porque no es una cosa grave. La semana pasada lo tenía bastante mal y la mejoría ha sido grande. Si esta semana no juego, no pasa nada. Volveré para la siguiente. Tengo la conciencia tranquila. Sé el nivel que he dado y el sábado tengo que rendir al mismo”, finalizó Aretxabaleta. En caso de no llegar a tiempo, todo indica que Álvaro Untoria tomaría su puesto.

Por otro lado, Ander Imaz será el adversario que cubrirá la zaga de Aimar Olaizola. El de Oiartzun lleva desde la segunda jornada acumulando problemas en la misma mano que Aretxabaleta. “Voy de partido a partido, sin apenas entrenar. Trato de cuidar la mano, pero hay veces que a mitad de partido se me va cargando”, analizó el guipuzcoano. Su fusión con Aimar Olaizola está siendo satisfactoria: tres victorias de cuatro choques. “El Bizkaia es un frontón que me gusta”, remachó.