las palmas - El técnico catalán Manolo Márquez se convirtió ayer en el tercer entrenador que deja su puesto en Primera División, tras Luis Zubeldía (Alavés) y Fran Escribá (Villarreal), pero esta vez su desvinculación con la UD Las Palmas sucede sin medir el cese de por medio, según se desprende de sus palabras. “Es una dimisión en toda regla”, dijo, por “honestidad y dignidad”, ya que se sentía “desubicado”, ya que no supo trasmitir a los jugadores lo que pretendía. El club canario no ha comunicado el nombre de su sucesor, aunque el exjugador de Las Palmas y Deportivo, centre otros, Turu Flores se perfila como sucesor.
La marcha de Márquez se produce 24 horas después de la derrota ante el Leganés (0-2), en el Estadio Gran Canaria, si bien seguirá vinculado al club con nuevas responsabilidades en el Departamento de Formación y Captación. El ya extécnico del equipo canario sin embargo añade que no siente que haya fracasado, ni considera que su marcha sea un acto de cobardía antes de visitar el próximo domingo al Barcelona después de encajar cuatro derrotas en seis partidos y las dos últimas de forma consecutiva, aunque el equipo amarillo esté fuera de los puestos de descenso.
Márquez ha ofrecido en solitario la rueda de prensa para explicar los motivos de su marcha, sin estar arropado en la mesa por nadie del club; ni el presidente de la entidad, Miguel Ángel Ramírez, su máximo valedor cuando fue nombrado entrenador del primer equipo. - K. T.