Un Barcelona aún en construcción recibe al Real Madrid con el objetivo de lograr una victoria que le permita encarar, con garantías, la vuelta de la Supercopa de España, y reafirmar su confianza en el nuevo proyecto de Ernesto Valverde.

Los azulgranas, afrontan el primer partido oficial del nuevo curso sin el astro brasileño y con solo tres caras nuevas: las del lateral Nélson Semedo, el central Marlon Santos y el extremo Gerard Deulofeu. Valverde no podrá contar con los lesionados Rafinha Alcántara y Thomas Vermaelen. Pese a los problemas que el Barça está teniendo en la confección definitiva de la plantilla, el equipo ha dejado unas sensaciones más que notables en esta pretemporada.

En la gira norteamericana, los azulgranas practicaron un fútbol atractivo, recuperando la presión alta tras pérdida y derrotando a rivales de entidad como el Juventus, el Manchester United y el propio Real Madrid, al que venció por 2-3, en Miami. Lo intentará repetir en el Camp Nou con un once titular muy similar al que Luis Enrique utilizaba la temporada pasada.

Así pues, Valverde podría calcar la alineación que sacó en la goleada ante el Chapecoense (5-0).

El Real Madrid, por su parte, llega a la cita con el deseo de conquistar el Camp Nou en una muestra de poder que siga asentando su dominio actual en las grandes competiciones tras conquistar la pasada temporada Liga de Campeones y LaLiga Santander. El objetivo del sextete encara su segundo test.

Las malas sensaciones de pretemporada, sin un solo triunfo en ninguno de sus amistosos, las enterraron los hombres de Zinedine Zidane en cuanto hubo algo en juego. La final de la Supercopa de Europa despejó todas las dudas y reapareció el alto nivel competitivo que siempre muestran en las finales. Su objetivo es repetirlo en una que se juega a doble partido y por un título, la Supercopa española, a la que el técnico madridista dio mayor importancia por el rival que tiene enfrente.

A ella se apunta Cristiano Ronaldo. Listo para ser titular en un estadio donde dejó huella en más de una ocasión y con ganas de silenciar todo lo que llegó en un verano de filtraciones y asuntos judiciales, antes de encarar el miércoles el recibimiento de la afición del Santiago Bernabéu. Tras su suplencia en Skopje, su inclusión en el once empujan a una decisión táctica por tomar a Zidane, que desde su llegada al club nunca ha perdido una final. - Efe