Serre Chevalier - A pesar del maltrato al que le ha sometido el Tour, apolillado por las caídas el madrileño, Contador quiso una quimera. El líder del Trek es un inconformista. Lejos de la zona noble de la carrera francesa -junto a otros fugados dispuso de cuatro minutos de ventaja en un momento de la jornada- se adentró en los Alpes porque quería un triunfo de etapa. Llenó el petate del entusiasmo con arrojo y ambición en un día que en la salida le parecía “perfecto”. Optimista, el madrileño quiso dejar su rúbrica después de la cabalgada con Landa camino de Foix. Como entonces, Contador no pudo saborear la victoria pero se dio un homenaje que honró el ciclismo de combate y aventura. “Me he dado un gustazo, aunque he pagado el esfuerzo de la Croix de Fer. Le he dicho Nairo que viniera conmigo, se ha quedado, le he esperado, y al final me he ido solo. En el último puerto, con tantos ataques, lo he pagado. No he podido rematar que era el objetivo. Si (los aficionados) han disfrutado me vale. Yo he disfrutado, pero eran tantísimos kilómetros?”.

Contador trató que Quintana fuera su compañero de viaje, pero el colombiano apenas se tiene en pie. “No hay piernas y lo único que podemos hacer es terminar la carrera, no abandonar y seguir hasta París”, dijo lacónico el colombiano, que perdió 7’47” con Primoz Roglic, vencedor de la jornada, y algo más de seis minutos con Froome, Landa, Bardet y Urán. El desplome de Quintana es absoluto. Contador tampoco puede estar con los mejores, pero no se abandona a la derrota. No tiene lugar en sus pensamientos. El madrileño se lamentó de que no accediera en la fuga desde el comienzo lo que le obligó al remonte y a un desgaste mayor. “Si llego a coger la escapada a la primera no hubiera sido un problema, pero ha sido en el km 70, a contrapié, y eso ha hipotecado mis opciones a la victoria”. El Tour tira los dados hoy en el Izoard a la espera de la crono de Marsella. La cumbre que remata la etapa es el último campo de batalla para Contador. “No hay muchas oportunidades. Me encuentro bien y eso me anima. Mañana (por hoy) será otro día y vamos a intentarlo”, cerró el madrileño. - C. Ortuzar