LE PUY-EN VELAY - “Tengo claro que esto no puede volver a pasar. Vaya donde vaya, hay que tener las cosas claras, porque no quiero volver a ir al Tour de segundo y, si voy, que sea porque yo quiero”. Mikel Landa habló claro ayer, en la última jornada de descanso de la ronda francesa. Con voz firme y sin preámbulos, el ciclista alavés vino a decir que todavía desconoce para quién correrá la próxima temporada, pero que, sea donde sea, lo hará como líder de equipo. No quiere volver a pasar por lo de este Tour, donde en más de una ocasión se ha visto obligado a frenar -su bicicleta y su ambición- en favor de un Chris Froome con menos piernas que él. En peor forma. Así que, aunque el mismo Landa haya reconocido que todavía no ha tomado una decisión sobre su destino, es el Movistar de Eusebio Unzué el conjunto que parece haber tomado la delantera entre todos los pretendientes. Porque, en el año de su explosión definitiva, tras su increíble Giro y su gran actuación en la Grande Boucle, a Landa novias no le faltan. Y algunas son de economía poderosa y mucho petrodólar. “Por ahora, mi futuro todavía no está definido porque aquí prefiero centrarme en la carrera. Pero no tardaré en comunicarlo”, concluyó.

Y es que, hoy por hoy, el alavés continúa siendo corredor del Sky y se encuentra inmerso en la pugna por otorgarle a Froome su cuarto Tour. Sexto en la clasificación general y con el podio en sus sueños, Landa acepta su rol de primer ayudante. De gregario más valioso. Sabe que es el principal apoyo del británico en la montaña y, por ello, se mantendrá fiel a él. Y al plan del equipo: “A veces cuesta un poco reprimirse en plena carrera, pero sé a lo que vine y es lo que hay. Aquí estamos jugando a ganar el Tour”. El de Murgia se encuentra a poco más de un minuto (1:17) del maillot amarillo de Froome y tiene el podio a tiro. Llegar a París con opciones de subir al pedestal de la ronda gala es la ilusión de Landa y, teniendo en cuenta su actual estado de forma, es más que factible. Sin embargo, el corredor del Sky reconoce que no hará nada que “pueda perjudicar a Froome”. “Ojalá estemos los dos en París. Me encantaría porque me veo con capacidad para ello, pero es complicado porque todavía hay rivales fuertes para llevarse la general. Así que no podemos descuidarnos en pensar o plantear una estrategia para que yo este en el podio. Solo nos centramos en que Froome gane y no voy a hacer ningún movimiento esta semana que pueda perjudicarlo”.

Y es que parece que Landa tiene las horas contadas en el Sky; sin embargo, el alavés reconoció que su futuro incierto no ha cambiado nada la estrategia planteada por el conjunto británico a comienzo de carrera, ni el buen ambiente que existe entre el grupo. De hecho, el de Murgia salió a desmentir los rumores que indicaban que el Sky, despechado por su salida, había puesto más de una traba en el trabajo del, por el momento, su corredor. Su labor irá más allá de ser un mero gregario, de proteger exclusivamente a Froome: “Para el Sky sería bonito tenerme también en París, da igual lo que haga el año que viene porque me quieren tener contento de cara a esta semana, para que todo vaya bien y yo pueda dar el máximo por el equipo”. De esta forma, Landa encara sus últimas etapas del Tour como gregario, con toda la intención de ser, en el futuro más cercano, el jefe de filas de un equipo que le ayude a intentar conquistarlo: “Todavía no he tenido tiempo para disfrutar de este carrera como he hecho con el Giro pero tampoco me atrevo a decir que tengo un Tour en las piernas. Como mínimo sé que puedo intentar ganarlo”. Y es que ahora, el de Murgia reconoce que no podría con el todopoderoso Froome en un gran cara a cara porque “él siempre me ganaría por la contrarreloj final de Marsella”.

seis etapas A este Tour de Francia le quedan seis etapas. Seis jornadas en las que Landa, y el Sky entero, defenderán con uñas y dientes el maillot amarillo de Froome. El corredor alavés reconoció ayer que el equipo británico todavía no ha definido la estrategia a seguir en esta última semana, pero es consciente de que serán las jornadas alpinas de mañana y el jueves las más importantes antes de llegar a París: “No tenemos miedo a ninguna etapa porque somos un equipo fuerte y Froome está bien. Es más, tenemos ganas de que lleguen para poder aclarar este Tour y de demostrar quién es el ganador”.

Para finalizar, Landa reconoce que es el AG2R el conjunto más fuerte del pelotón después el Sky; y que su líder, Romain Bardet, ahora tercero a 23 segundos del amarillo, es el principal oponente a seguir: “Es el rival mas fuerte porque tiene un buen equipo alrededor; y a Aru y a Urán no les veo tan activos”.