londres - La primera ronda del torneo de Wimbledon concluyó el martes con un total de ocho abandonos, lo que ha hecho aumentar las sospechas de que algunos jugadores saltan a la pista sabiendo que no están a punto físicamente y sí preparados para cobrar las 39.928 euros con los que se les premia por disputar el primer partido del torneo. Con la retirada del español Feliciano López en el cuarto set de su partido contra Adrian Mannarino, por una lesión en la planta del pie izquierdo, se elevaron a ocho las retiradas en primera ronda, siete hombres y una mujer.

Desde que comenzó la Era Open en 2008 nunca se habían registrado tantos abandonos por lesión en el torneo inglés, circunstancia que no ha pasado inadvertida. “Solo el propio jugador sabe si está capacitado para jugar. Si no es así, debería ceder su lugar a otro”, sostuvo Federer en la rueda de prensa posterior a su debut sobre la hierba londinense. El suizo propuso como solución que “los Grand Slam adoptaran la norma que ya se aplica en la ATP de que aunque no puedas jugar por lesión, el jugador que se retira siga cobrando el premio, “aunque si esto sucediera quizá se perdiera a la mitad de los jugadores”, dijo en broma el de Basilea.

La nueva a la que hizo referencia el número 5 del mundo la introdujo la ATP en enero y dice que todo jugador puede darse de baja en un torneo ATP por lesión o enfermedad, siempre y cuando cuente con el dictamen del médico, dos veces en la misma temporada, pero no de forma consecutiva, y que puede ser reemplazado por otro competidor, proveniente de la fase previa. El jugador que se retire recibirá el premio asignado para esa primera ronda. No así el que le sustituye, que ganará el premio en metálico de la fase previa y lo que perciba en el cuadro principal, a partir de la segunda ronda. Esta norma va a ser revisada durante o antes del Abierto de EE.UU. este año. Solo afecta a torneos ATP, no a los del circuito WTA ni tampoco a los cuatro que forman el Grand Slam.

Algunos jugadores, como el australiano Bernard Tomic, de 24 años, no tienen problema en reconocer su “falta de motivación” y que juegan por dinero. “Todos trabajamos por dinero”, afirmó en la rueda de prensa posterior a su derrota en primera ronda del torneo en el All England Tennis Club. Cuando fue preguntado después de reconocer que está “aburrido” del tenis, y si se planteaba devolver el premio, el australiano desafió diciendo que lo haría si Federer o Djokovic también lo hicieran. “Si pedís a Federer que done su fortuna, ¿qué creéis que responderá? Todos jugamos por dinero”. - Efe