Portugal se lanza a ‘semis’

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NUEVA ZELANDA: Marinovich, Doyle, Boxall, Durante (Min. 74, Smeltz), Ingham, Thomas; McGlinchey (Min. 37, Tuiloma), Rojas, Smith, Lewis (Min. 65, Barbarouses) y Wood.

PORTUGAL: Rui Patrício, Eliseu, Pepe, Alves, Semedo, Danilo, Moutinho, Bernardo Silva (Min. 46, Pizzi), Quaresma (Min. 83, Martins), André Silva y Cristiano Ronaldo (Min. 69, Nani).

Goles: 0-1: Min. 33; Cristiano, de penalti. 0-2: Min. 37; Bernardo Silva. 0-3: Min. 83; André Silva. 0-4: Min. 91; Nani.

Árbitro: Mark Geiger (USA). Amonestó a Semedo, Lewis, Ingham y Pepe.

Incidencias: Partido correspondiente a la primera fase de la Copa Confederaciones disputado en el estadio San Petersburgo ante unos 56.300 espectadores.

Kazán - Portugal se clasificó ayer por méritos propios para las semifinales de la Copa Confederaciones al aplastar a Nueva Zelanda (4-0) y acabar la primera fase como líder de su grupo, por delante de México. De esta forma, la selección lusa se enfrentará el próximo miércoles en la primera semifinal en Kazán al segundo clasificado del Grupo B, que podrían ser Alemania o Chile, teniendo más probabilidades esta última. Cristiano Ronaldo, alejado sobre el césped de toda la controversia fiscal que el rodea, salió con hambre de gol y a la media hora ya había anotado su diana. De penalti. A pesar de esto, curiosamente, fueron los neozelandeses los que salieron más enchufados y también fueron los primeros en disparar a puerta por medio de Wood, el máximo goleador de la segunda visión inglesa. Le costó unos 20 minutos a Portugal desperezarse e imponer su voluntad ante su rival. El todavía delantero del Real Madrid avisó en un par de ocasiones y a la media hora remató de cabeza al larguero tras un medido centro desde la izquierda de Quaresma. Quizás la campeona de Europa abusó de los centros a la olla, aunque en un nuevo córner los defensas de Nueva Zelanda cometieron un ingenuo penalti sobre Danilo. Cristiano pidió el balón y marcó el primer gol del partido. Poco después, de nuevo el incombustible Quaresma recibió la pelota, la picó para Eliseu, que subía como una exhalación por la izquierda y su centro al corazón del área fue aprovechado por Bernardo Silva para hacer el segundo. El encuentro ya estaba encarrilado. Tras la reanudación Pizzi, Pepe recibió una tarjeta amarilla que bien pudo ser roja y, como estaba advertido de suspensión, se perderá las semifinales. Tras esto, Portugal comenzó a jugar a medio gas, sin ganas de abusar de una Nueva Zelanda perdida. Pero en los últimos diez minutos los neozelandeses se desfondaron.