Bilbao - Hace un par de cursos, con la creación de la Emakume Cup y la puesta de largo del club Txokoan de Larrabetzu, la pelota a mano femenina sénior tomó cuerpo. Antes, iniciativas como la de Emakume Pilotari luchaban por hacer crecer la presencia de chicas en los frontones. Aquel campeonato, organizado por la Federación de Bizkaia de pelota vasca, fue retransmitido en directo por ETB-1, y tuvo un gran seguimiento. Iker Amarika se encontraba dentro de la Junta del ente federativo y, una vez que salió de la misma, organizó en 2017 el Laboral Kutxa Emakume Master Cup, que abrió la veda a manistas de todo el mundo, incluyendo dos categorías y la posibilidad de dar entrada a mujeres sin ficha federativa. Las finales se disputaron el domingo 5 de marzo con el frontón Amorebieta IV a rebosar. Arrizabalaga-Etxaniz vencieron a Arozena-Mendizabal. Se midieron a mano cuatro pelotaris de alto nivel en la modalidad de paleta goma.
Después de aquel momento, la pelota femenina se encuentra en una “buena ola”, destaca Mendizabal, La anoetarra es una pelotari con mil batallas a sus espaldas y es consciente de que en Gipuzkoa en verano está surgiendo actividad. Hay competiciones en Añorga y Getaria y se espera celebrar una de paleta femenina antes de los festivales del torneo de Aste Nagusia de Donostia. “Por supuesto, todas estas iniciativas son cosas positivas. Vemos que hay mucha oferta, pero también tiene sus puntos negativos. Bajo mi punto de vista, me he dado cuenta de que esto es una ola a la que le falta control. Ahora mismo, está muy bien que haya festivales de pelota femenina en los pueblos, tanto de mano como de herramienta, pero siempre estamos yendo las mismas a jugar. No hay una estructura sólida. Nos llaman y nos piden que organicemos nosotras”, destaca la campeona del mundo, que marchará en julio a México en busca del entorchado de frontball. Muchas veces, afirma, a la hora de contratar a las féminas, se tiende a no equiparar los precios que tienen las tarifas de los chicos pelotaris. “A veces preguntamos cuánto van a cobrar los que van después de nosotras. Al final, muchas veces se está programando a gente que tenemos la casa llena de txapelas y vamos a los sitios perdiendo”, sostiene.
También analiza que “está muy bien que surjan festivales de exhibición en fiestas y campeonatos veraniegos”. “No obstante, por la pelota femenina se tiene que trabajar desde los clubs, desde la base, dando opciones a las chicas a jugar más partidos en todas las modalidades”, recita Mendizabal.
Paula Iturbide, del club Txokoan de Larrabetzu, por su parte, concreta que “este año tenemos menos exhibiciones que los anteriores”. Y es que, según la vizcaína, “se está repartiendo más el pastel y nosotras no estamos yendo a jugar fuera de Bizkaia. Eso está bien”. Basauri, Mungia, Ermua, Busturia, Markina, Dima, Santurtzi, Bilbao, Zeberio, Muskiz, Orduña... son algunos de los lugares en los que han mostrado su juego.
Asimismo, hacen “hincapié” en la “visibilización”, que es un pilar de Txokoan, por medio de visitas a centros educativos. “Se están moviendo más campeonatos que exhibiciones”, desgrana Iturbide. “Han salido grupos de manistas que están ampliando la oferta y estamos compartiendo las exhibiciones”, finaliza.
