Sito Alonso abandonó el parqué del Buesa Arena con un monumental enfado inmediatamente después de que el último tiro de Shane Larkin ni siquiera tocase el aro y se consumase la derrota del Baskonia. Entre evidentes gestos de desaprobación a la actuación arbitral se marchó raudo a rumiar su cabreo en el vestuario. Unos minutos después compareció en la sala de prensa aparentemente bastante más calmado y con un discurso más centrado en alabar las cosas buenas realizadas por sus discípulos que en enumerar las quejas sobre el trío de colegiados aunque, eso sí, encargándose de que fuera evidente su malestar.

“Hemos hecho bastantes cosas bien durante bastantes minutos y hemos recuperado nuestra identidad, que la habíamos perdido durante la serie de cuartos pero el momento clave del partido ha llegado cuando ganábamos 77-70 y ha habido varios ataques seguidos que ni siquiera hemos tirado. Hemos cometido tres pérdidas. Una ha sido un error nuestro y las otras dos quiero revisarlas en el vídeo porque tengo mis dudas de lo que ha pasado. Ellos nos han castigado mucho esas acciones y a partir de ahí todo se ha complicado”, resumió.

Cuestionado por la última falta cometida por Sastre sobre Ledo y el hecho de que no fuera considerada antideportiva, el técnico azulgrana no quiso ofrecer una opinión antes de “volver a ver el partido” porque “en caliente puede parecer una cosa y luego ser otra” pero sí significó que por esa y otras acciones de la contienda “no estoy contento con la actuación de los árbitros, aunque es algo que no depende de mí”.

En cualquier caso, Alonso se esforzó por trasladar también un mensaje de esperanza y optimismo pese al duro varapalo recibido en esta apertura de la serie. “Por momentos he visto al equipo de antes del play off y estando así no me preocupa ir 0-1 ni siquiera si perdiéramos el segundo encuentro, porque nos veo capacitados para ganar allí dos partidos”, manifestó.

Pedro Martínez, por su parte, reconoció que el Baskonia tuvo “minutos increíbles” y durante buena parte del encuentro “nos superó en intensidad” pero destacó que “lo mejor es que hemos seguido creyendo hasta el final”. Pese al triunfo, evitó lanzar las campanas al vuelo. “Solo es un 0-1, nada más”.