bilbao - Jon Rahm firmó en la tercera jornada del The Players la peor vuelta de su carrera profesional. 82 golpes para finalizar el recorrido diez más que el par del campo. El vizcaino empezó el día con el plan de atacar los primeros puestos y se despidió fuera del torneo. Simplemente, todo le salió al revés. El golfista de Barrika no encontró una explicación lógica a lo sucedido y se tuvo que conformar con tener un día más de descanso de lo previsto. La única buena noticia para él es que a pesar de no competir el domingo, pudo sumar una pequeña cantidad de puntos, lo que le mantiene en la duodécima posición.

“No ha salido nada en el campo. Cuando me di cuenta de que iba más 7 en siete hoyos, me fui. Hice bastantes buenos swings, pero solo recibía un golpe tras otro. Nada era como yo esperaba”, explicó Rahm al terminar la tercera ronda. Una vuelta en la que fue complicado sacar nada positivo y que le obligó a abandonar el The Players con un sabor de boca muy malo. “Estaba en la lona y seguía recibiendo golpes. Digamos que no ha sido mi mejor día. No hay nada más que hacer, hay muy pocas cosas buenas que sacar. Lo único es que tendré un día extra de descanso. Nada más”, añadió.

El hoyo 6 fue una de las claves del mal día de Rahm. Un double bogey empezó a sepultar todas las opciones de remontada. “Tiré cinco putts en los primeros cuatro hoyos y marchaba tres sobre par. En ese momento el putt estaba funcionando y después a partir del 6 todo se vino abajo. Fallé dos putts a medio metro. No sé qué puedo decir sobre eso. De ahí al final, mi cuerpo no respondía. Hacía tiempo que no me pasaba algo así y cuando me había pasado había logrado reaccionar”, comentó el vizcaino mientras buscó la justificación más lógica: “Son cosas que pasan. Es golf”. - J. V. de Lecea