PARíS - La 115ª París Roubaix (desde las 11.00 horas en Eurosport 1), la carrera de los adoquines por excelencia, anuncia para hoy un nuevo duelo entre el eslovaco Peter Sagan (Bora), doble campeón mundial, y el belga Greg Van Avermaet (BMC), el rey de las clásicas de esta temporada, si bien aspiran a la gloria de la prueba reina de la primavera un buen número más de corredores.
No será una edición más del Infierno del Norte, este año con un trayecto de 257 kilómetros entre Compiègne y el velódromo de Roubaix que incluye 55 kilómetros de pavés repartidos en 29 sectores. Será la carrera en la que se despedirá de la competición el belga Tom Boonen, cuatro veces vencedor y uno de los mejores clasicómanos de la historia.
Van Avermaet se ha ganado la condición de favorito número uno, ya que el campeón olímpico llega lanzado después de apuntar en su palmarés otras tres clásicas sobre pavés: la Omloop Het Nieuwsblad, la E3 Harelbeke y la Gante-Wevelgem. El Tour de Flandes se lo arrebató su compatriota Philippe Gilbert, pero su momento de forma le permite ocupar la cabeza del cartel.
No lo tendrá fácil el medallista de oro en Río ante Peter Sagan, herido en su orgullo tras la caída que le eliminó en Flandes. El maillot arcoiris, vencedor de la Kuurne-Bruselas-Kuurne y dos etapas de la Tirreno-Adriático, tratará de levantar el adoquín en el velódromo de Roubaix, y así engrandecer su rico historial.
Un dúo de favoritos que contará con una fuerte oposición por parte de los principales velocistas del pelotón. Será baja el británico Mark Cavendish, pero no faltarán los alemanes Greipel y Degenkolb, el noruego Kristoff y el francés Demare.
Y, por supuesto, no se puede olvidar nunca al Quick Step, pues a la presencia de Boonen hay que añadir al checo Stybar, al holandés Tersptra y al belga Lampaert, reciente ganador de A Través de Flandes. Menos opciones parece tener el defensor del título, el australiano Mathew Hayman.
En cuanto a la carrera, se presenta como siempre: un trazado casi llano y sectores intermitentes de pavés de diferentes dificultades.
Es de suponer que en Arenberg se haga la primera gran criba (km 161) y luego Mons-en-Pévèle (km 208) y el Carrefour de l’Arbre (km 240) harán la selección casi definitiva.
Esta edición tendrá el trazado de piedra más largo desde 1994 (55,950 kms). El último sector de traqueteo, el Carrefour de l’Arbre, no es el más largo (2.100 metros), ni el más técnico, pero es el definitivo, el escenario donde los aspirantes deben dar el último golpe de fuerza si quieren distanciar a sus rivales. A meta solo faltarán 15 kilómetros. - Efe’