Hace diez años, la Fundación Basque Team surgió con el objetivo de fomentar el deporte vasco de alto nivel y de alto rendimiento. Un propósito sencillo de plasmar sobre el papel, pero complicado de llevar a cabo en la práctica. Sin embargo, una década después, la entidad sin ánimo de lucro continúa al pie del cañón y acaba de soplar las velas en un momento económicamente convulso, por no decir precario. Y, a pesar de ello, Basque Team continúa fiel a sus inicios y se mantiene dando prioridad a lo más esencial del deporte, que son los deportistas. Por ello, la fundación incluye en su nómina a más de 60 atletas, que se benefician de su beca para poder participar en las más altas competiciones internacionales y escalar hasta la excelencia. Asimismo, desde la entidad destacan que dichas ayudas están enfocadas “básicamente al deporte no profesional, especialmente a las modalidades deportivas olímpicas y paralímpicas”, por lo que también se destinan al personal técnico especializado; y que, además de las ayudas económicas, los deportistas también cuentan con sus “servicios de apoyo”, como son los biomédicos o el coaching personalizado.

Es decir, Basque Team nació con el fin de “posibilitar una nutrida representación vasca en la alta competición deportiva internacional” y conseguir unos mejores resultados. Por lo que no extrañan los éxitos, en forma de títulos mundiales y medallas olímpicas, conseguidos en esta década. Y es que en el mismo 2007, apenas unos meses después de su creación, la entidad celebró sus primeras victorias. Oier Aizpurua se proclamó campeón del mundo de maratón de piragüismo en la localidad húngara de Gyor, Unai Elorriaga se caló la txapela continental de omnium en ciclismo en pista e Iker Martínez y Xabi Fernández se erigieron como campeones de Europa de vela en la modalidad de 49er. Las tres primeras victorias de las centenares que llegarían temporada tras temporada, hasta completar una década. Y es que después llegó el 2008, año olímpico, y con él la inmejorable plataforma deportiva que supuso Beijing. Los paralímpicos Richard Oribe, con cuatro medallas -tres platas y un oro en diferentes modalidades de natación-, y Javier Ochoa, con un oro en ciclismo contrarreloj y una plata en ruta, fueron los protagonistas de los primeros Juegos Olímpicos de Basque Team, donde Martínez y Fernández volvieron a triunfar en 49er subiéndose al segundo escalón del podio.

Sin embargo, después de eso, cuando la fundación apenas llevaba tres años en marcha, Patxi Usobiaga hizo valer al deporte no olímpico, minoritario en la nómina de Basque Team pero igual de importante, al convertirse en campeón del mundo de escalada. En 2010, la entidad apostó por el fomento del deporte minoritario femenino y recibió una recompensa inmejorable gracias al Campeonato de Europa de rugby XV y de rugby a 7 que ganó la selección estatal, con las becadas Bárbara Pla e Isabel Rodríguez en sus filas. Sin embargo, ese fue el año, de nuevo, del nadador Oribe, que consiguió cinco medallas en los Mundiales de natación adaptada de Eindhoven; mientras que Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza hacían bueno el reto de Basque Team y coronaban el Broad Peak abriendo una vía inédita hasta el momento. Un año más tarde, Eunate Agirre volvía a mejorar la apuesta por las féminas con un Campeonato del mundo que supo a gloria tras vencer en la última prueba del circuito internacional.

Así se plantó Basque Team en el ecuador de su vida, en su quinta primavera. Año olímpico. Y, de nuevo, las mujeres volvieron a comandar los éxitos del deporte vasco. La piragüista Maialen Chourraut y la luchadora Maider Unda fueron las únicas que consiguieron colgarse una medalla, en ambos casos de bronce; mientras que Richard Oribe seguía a lo suyo, con dos preseas -plata en 100 metros libres y bronce en 200 libres- de la cita paralímpica de Londres. Después, llegó el turno de los deportes más abandonados: el patinador Patxi Peula se colgó un oro y cinco bronces en el Europeo de 2013 y el esquiador paralímpico Jon Santacana comenzó su historial de éxitos con tres oros en el Mundial de La Molina de ese mismo año. Y, por fin en el 14, Efrén Vázquez, que anunció ayer su retirada, consiguió sus dos primeras victorias en Moto3, en Indianápolis y Malasia.

los éxitos más recientes Con paciencia y aprendiendo de los errores, pero siempre primando a los deportistas, Basque Team fue cumpliendo años hasta llegar a la decena. Pero si se habla de éxito deportivo en la vida más reciente de la entidad vasca, caben destacar dos nombres propio: Maialen Chourraut y Lucas Eguibar. La piragüista lasartearra llegó a 2015 con un oro en el Europeo de Alemania, pero fue en los Juegos de Río cuando se destapó con un oro olímpico e histórico. El snowboarder donostiarra, por su parte, también se proclamó hace dos años vencedor de la Copa del Mundo de cross y dueño del Globo de Cristal; sin embargo, fue apenas dos semanas cuando el rider guipuzcoano sumó dos medallas -platas- en el Mundial de Sierra Nevada. Además, el esquiador Jon Santacana continúa en línea ascendente con dos nuevas preseas en el reciente Campeonato del Mundo de Tarvisio.