La Camperona - Nairo Quintana (Movistar), nuevo líder de la Vuelta, se mostró “contento y moralmente reforzado” tras enfundarse el maillot rojo de líder en la cima de La Camperona y verse “por delante de los rivales”. “La sonrisa que llevaba en meta era solo puro sufrimiento. Lo hemos conseguido. Era este mi objetivo principal: ganar unos segundos a estos rivales”, dijo.

Quintana se refirió a la estrategia desplegada por el Movistar a la hora de la verdad, cuando empezaron las rampas más exigentes del puerto leonés. “El tramo duro de La Camperona lo iniciamos con mucha precaución; estábamos esperando el ataque de Froome, que efectivamente llegó, y supimos responder a él. Llegué a la Vuelta con ganas, como en toda gran vuelta que disputo, y esto me dará un punto más de confianza. Da moral saber que he estado algo por encima de los rivales”, comentó.

El ruso de origen uzbeko Sergey Lagutin (Katusha) se mostró exultante por su victoria de etapa porque no le sobran triunfos y “es el primero en una gran vuelta”. “Estoy muy feliz porque este triunfo es un sueño hecho realidad. Cualquiera sueña con conseguir algo así”, aseguró.

Sobre la forma en que superó a sus rivales dijo que “no ha sido tan difícil como pueda parecer. He sabido aprovechar que estaba en la escapada del día, en la que todos hemos trabajado bien y a ello se ha unido un poco la suerte que no nos han cogido y que tenía buenas piernas”.

Alberto Contador (Tinkoff) no acusó tanto como se esperaba su caída del viernes, en un día en el que se reivindicó y aseguró que su lema es “querer es poder y es el momento de aplicarlo”. “He mantenido la cabeza fría y me he marcado mi ritmo”, manifestó nada más cruzar la línea de llegada del Alto de la Camperona.

El de Pinto reconoció que “no he podido seguir” el ataque de Quintana, que consiguió “meter diferencias”. Una vez finalizada la etapa, su intención era regresar lo antes posible al hotel para “trabajar con los fisioterapeutas y las máquinas como hicimos ayer para recuperarme”. - Efe