Castrelo de Miño (OUrense) - El británico Peter Kennaugh (Sky) fue el encargado de quitar el precinto al primer jersey rojo de la Vuelta merced al triunfo del Sky en la contrarreloj por equipos disputada entre Laias y Castrelo de Miño (Orense), de 27,8 kilómetros, en la que Movistar igualó en tiempo y Alberto Contador cedió 52 segundos.
El conjunto británico capitaneado por el triple ganador del Tour Chris Froome se llevó la victoria con un registro de 30.37 minutos, tan solo 4 centésimas por delante del Movistar de Nairo Quintana y Alejandro Valverde. Le siguieron a 6 segundos el Orica del colombiano Esteban Chaves y en 7 el BMC de Samuel Sánchez.
La peor parte se la llevó Alberto Contador, ya que el Tinkoff marcó en meta 31:29 y el madrileño se llevó un golpe considerable a las primeras de cambio: 52 segundos de retraso ante sus rivales directos.
Recorrido de placer entre centros balnearios de aguas termales, bodegas y campos de viñedos que invitan a degustar un buen ribeiro en cada curva. No hubo tiempo para el spa, sino para la batalla de principio en un recorrido rápido y técnico en el que estaba en juego el primer liderato.
La primera candidatura seria la presentó el Etixx, que rompió la barrera de los 31 minutos en la meta de Castrelo, con un tiempo de 30.59 minutos, a 53,8 kms/hora, registro que colocaba de líder provisional al español David de la Cruz.
Quedaban por despegar las formaciones de los grandes favoritos. El Orica australiano tomó el relevo del Etixx, al que superó en 16 segundos (30.43), y por detrás llegaba el BMC, doble campeón del mundo de la modalidad en Ponferrada 2014 y Richmond 2015, si bien de aquellas hazañas solo estaban rodando el estadounidense Van Garderen y el suizo Silvan Dillier.
La escuadra de Samuel Sánchez se quedó con la miel en los labios por un solo segundo, por lo que quedó rota su condición de favorito para que uno de sus corredores se enfundara el primer liderato. El honor de inaugurar el podio solo lo podían conquistar ya el Movistar de Quintana y Valverde, el Sky de Froome y el Tinkoff de Contador, el último en tomar la salida.
Movistar saltó la banca en meta tras cubrir el trayecto en 54,5 por hora, pero el Sky hizo un final excelente con su maquinaria a tope a medida que se acercaba a meta. Los hombres de Froome apretaron los dientes en un final de infarto, en el que las centésimas decantaron la suerte a favor de la escuadra británica. La cara fue para Kennaugh. El ciclista de la Isla de Man, de 27 años y campeón mundial y olímpico en pista en 2012, subió al podio a enfundarse la camiseta roja haciendo honor al esfuerzo colectivo de su equipo, feliz junto al Parque Naútico de Castrelo.
Movistar se mostró contento con Quintana y Valverde a buen recaudo, aunque lamentando la derrota tan ajustada. Y la cruz para Alberto Contador, quien “no esperaba perder tanto tiempo”. Un golpe que justificó en el hecho de que “los rivales han dado más pedales que nosotros”.