AREZZO - El italiano Gianluca Brambilla (Etixx-Quick Step) ganó en solitario la octava etapa del Giro de Italia, con salida en Foligno y llegada a Arezzo (186 kilómetros), poniéndose además la maglia rosa de líder de la carrera. Brambilla y Alejandro Valverde (Movistar) fueron los grandes protagonistas de una jornada con la ascensión a Alpe di Poti, a unos 28 kilómetros de meta, como punto álgido del día. El italiano, que formó parte de un grupo de 13 corredores que se formó en los primeros kilómetros de la etapa, venció con una ventaja de poco más de un minuto con respecto al segundo, su compatriota Matteo Montaguti (Ag2r), mientras que el murciano terminó sexto, a 1:41 del ganador y con el mismo tiempo que otros favoritos como Vincenzo Nibali (Astana) y Mikel Landa (Sky). En cambio, el holandés Tom Doumolin (Giant), líder hasta ayer, cedió 2:51 en la línea de llegada.

La etapa estuvo marcada por la larga fuga de 13 corredores, con Brambilla como mejor colocado en la general (a 1:56 de Dumoulin), que llegaron a contar con cinco minutos y medio de ventaja (a 46 kilómetros de meta) sobre un gran grupo con todos los favoritos. Todo ello a la espera de la subida a Alpe di Poti, a 28 kilómetros del final. La ascensión, de 8,6 kilómetros y pendientes medias de más del 9%, era especialmente esperada. Sus 6,5 kilómetros sobre tierra y grava, con el primer kilómetro y medio al 14% de desnivel, eran temidos. Lució el sol, pero, a falta de lluvia, hubo clavos que fueron retirados por organizadores y aficionados antes de que llegaran los ciclistas.

Por delante, Brambilla abandonó a sus compañeros de fuga en las primeras rampas. Por detrás, Valverde dinamitó el ritmo en un ejercicio de tremenda valentía. Pronto encontró premio a su esfuerzo. Dumoulin cedió terreno a las primeras de cambio, aunque Nibali, Landa y Zakarin, entre otros, aguantaron el tirón del murciano. Poco a poco, Valverde fue recortando la ventaja de Brambilla, pero, sobre todo, consiguió aumentar la suya con respecto a Dumoulin, al que ya aventajaba en un minuto a 18,4 kilómetros del final.

La cima de Alpe di Ponti la coronó Brambilla con 24 segundos de ventaja sobre Montaguti, el único de sus compañeros de escapada que le presentó algo de batalla, con Valverde a y compañía a 2:11, y con Dumoulin sufriendo a 3:31. Restaban 18,4 kilómetros para la llegada, con una bajada muy técnica. Brambilla, por delante, y Valverde, más atrás, se lanzaron abiertamente: el primero, para hacerse con la etapa y el liderato, aunque ahora su oponente por maglia rosa era Zakarin, que inició la etapa con una renta de 1:28 sobre el italiano. En el descenso se mantuvieron, más o menos, las distancias, llegando Brambilla a la meta de Arezzo en solitario, y alzando los brazos como merecido ganador de etapa, sumando los diez segundos de bonificación. Valverde, Nibali, Landa y Zakarin también encontraron su premio: una suculente ventaja con respecto a Dumoulin, favorito para la crono de 40,5 kilómetros de hoy. - Efe