PARÍS. "Sé cuantas veces he sido controlado dentro y fuera de la competición. Por favor, haga públicos mis datos. Por favor, publique mi pasaporte biológico, mi historial completo de controles antidopaje", señaló el tenista en una carta enviada al nuevo presidente de la ITF, David Haggerty.

Convencido de que el tenis es "un deporte limpio" y que "ha llegado el momento" de jugar la carta de la transparencia, Nadal pide a Haggerty que comunique, "lo antes posible cuando sea controlado los resultados que salgan de los laboratorios".

Esta misiva se hace pública un día después de que el tenista anunciara la presentación una querella por difamación contra Bachelot, que insinuó que su larga ausencia en 2012 se debía a un control positivo.

"He sido recientemente acusado públicamente por una antigua ministra de Deportes de un país tan importante como Francia de ser un dopado y de haber estado cubierto por las autoridades", indicó Nadal en su carta.

Nadal considera "inaceptable e injusto" que "alguien a quien se le supone cierto conocimiento del deporte pueda decir públicamente eso sin pruebas o evidencias".

No es la primera vez que Nadal pide una mayor transparencia de las autoridades federativas en lo que se refiere a la lucha contra el dopaje. Ya lo hizo durante el pasado Masters de Londres, antes de las acusaciones de Bachelot.

En su misiva al presidente de la ITF, el mallorquín asegura que nunca ha ocultado su deseo de luchar contra el dopaje, un "combate que hay que continuar de forma más dura y mejor si es posible".

Nadal dice que desde sus inicios ha creído que "los pilares del deporte eran el trabajo, el esfuerzo, la superación de las dificultades", lo que le llevó a "crecer como persona y como profesional" y a "elevar cada día el nivel de juego y las competencias".

"Es necesario que nuestro deporte se convierta en un estandarte mundial en el que la transparencia y la honestidad sean dos pilares de conducta y de manera de vivir", agregó.

El tenista reconoció que "algunos medios de comunicación, aficionados y patrocinadores no confían" en el deporte y creen que las instituciones "ocultan cosas y no actúan".

"Creo que ha llegado el momento de que nuestro deporte y nuestras instituciones deben avanzar comunicando mejor al mundo", aseguró.

Esta es la reacción de Nadal a las insinuaciones de Bachelot en un programa de la televisión en el que es tertuliana y en el que hablaba del positivo de la rusa Maria Sharapova.

"Cuando ves a un jugador de tenis que para durante varios meses, es que ha sido encontrado positivo. No siempre, pero muy a menudo", aseguró Bachelot en clara referencia a la ausencia del tenista español de las pistas en 2012 oficialmente por una rotura de tendón rotuliano.

Posteriormente, la exministra, alejada ahora de la primera línea política, aseguró que se limitó a expresar las insinuaciones que hacen medios de comunicación o profesionales, como el actual capitán del equipo francés de Copa Davis, Yannick Noah.

Pero Nadal se mostró muy molesto con la política y enseguida anunció que tomaría medidas legales, algo que concretó ayer con la presentación de una querella para defender su "integridad e imagen como deportista" y sus "valores".

"Deseo evitar (...) que cualquier persona pública pueda lanzar acusaciones injuriosas en un medio de comunicación contra un deportista, sin fundamentos ni datos que puedan demostrarlo, quedando impune", afirmó el tenista en el comunicado en el que hizo pública la querella.