Duración: 32 minutos de juego.
Saques: 1 de Víctor (tanto 2) y 8 de Altuna III (tantos 3, 5, 9, 11, 13, 17, 21 y 22).
Pelotazos: 135 pelotazos en juego.
Tantos en juego: 2 de Víctor y 10 de Altuna III.
Errores: 4 de Víctor.
Marcador: 0-1, 1-1, 2-1, 2-2, 2-15, 3-15 y 3-22.
Botilleros: Ejercieron de botilleros Pablo Berasaluze (con Víctor Esteban) y Ekaitz Saralegi (con Jokin Altuna).
Apuestas: Se cantaron de salida posturas a la par.
Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de final del Manomanista de Primera disputado en el frontón Beotibar de Tolosa. 600 espectadores.
tolosa - Después del destrozo de Iker Irribarria sobre Jon Jaunarena, ayer fue Jokin Altuna el que maltrató a Víctor Esteban, sin opciones, en los octavos de final del Manomanista de Primera. Fue otra masacre, le dejó en tres y la dinámica del duelo quedó rota muy temprano, con el empate a dos. Así, estas eliminatorias son dos argumentos más para valorar las diferencias que traza el mano a mano entre los contendientes, digna de estudio para las promotoras. Ya sea por hache o por be, por el material o por el modo juego; por la menor cantidad de pelotaris en las plantillas con respecto a hace una década o, quizás, por la falta de costumbre de jugar a una especialidad sacrificada y muy difícil, en la que disputan, a lo sumo, media docena de choques al año y los protagonistas necesitan tiempo, no se da con la tecla de la igualdad. Y es que, visto lo visto hasta el momento, es muy complicado que la emoción campe en el luminoso y, a día de hoy, solo el envite de la primera jornada entre el propio Víctor y Danel Elezkano se mostró parejo en todo momento. También hubo peloteo en el de Ezkurdia contra Retegi Bi, pero el marcador final (12-22) le quitó lustre. Algo habrá que hacer, porque tales diferencias acaban lastrando la modalidad, la más bonita del curso, y desarraigan al público, cada vez menos fiel a la cita.
No obstante, la victoria del amezketarra sobre el delantero riojano, actual campeón de Segunda, fue amplia, justa y contundente. Fue también un golpe para el menor de los Esteban, un pelotari que no suele perder la cara a los encuentros, por muy oscuros que pinten. Sin embargo, un Altuna III que llevaba dos meses y medio con solo dos partidos a la espalda y dos lesiones en las muñecas se lo acabó merendando, metiéndole ocho saques, con los que iniciaron las dudas, y buscándole la izquierda.
Tras el empate a dos, un par de primeros disparos del guipuzcoano metieron en problemas a Víctor, que trató de buscar el resto de aire y a bote para desestabilizarle. Pero fue él el que quedó tocado. Y Altuna III, que vio la brecha, más tranquilo, a favor de corriente, se puso las botas. Cruzando pelota encontró un filón. A su adversario le asaeteó el luminoso, que se estiró hasta el 2-15 en un abrir y cerrar de ojos. Con esa tacada, apenas le quedó resuello al de Ezcaray, quien buscó la reacción con una dejada desde el cuatro. Aun así, no pudo sumar más. Altuna III, sin fallos, se aprovechó de los nervios de su contrincante y terminó con la directa al cartón 22. Víctor ya estaba desdibujado.
El puntillero de Aspe, de este modo, alcanza por segundo curso consecutivo los cuartos de final del Manomanista de Primera. Se encontrará con Juan Martínez de Irujo el lunes en Tolosa aunque la participación del iberoarra es una incógnita. “Prefiero jugar contra Irujo que ir a semis sin hacerlo”, declaró el guipuzcoano.