Vitoria - Merecida la derrota rojilla cosechada el pasado sábado en Salburua ante un Fuenmayor muy superior que sirve a los riojanos para alejarse casi definitivamente de los puestos de descenso y meter de lleno a los vitorianos en la pelea por la permanencia. El partido comenzaba con un Fuenmayor controlando el balón y siendo muy profundo con pases largos de Moisés, el mejor jugador del partido, que lideró una victoria que ya estaba encaminada al descanso. Dos goles de Tejada y el propio Moisés tras recortar con su pierna izquierda y cruzar el balón con su derecha, ponían muy cuesta arriba las cosas para el Aurrera, que así y todo pudo haber recortado distancias si Aritz no llega a fallar un disparo a puerta vacía. En la segunda parte, los rojillos saltaron a pista más agresivo en la presión, pero sin ideas en ataque. El físico comenzó a verse resentido y Manuel Melgar apostó por el ataque con la figura del portero-jugador cuando faltaban diez minutos. Pero de nuevo Aritz volvía a fallar con estrépito en la primera jugada con ataque de cinco y Joni anotaba después para los riojanos el tercero y el cuarto de la tarde, éste en el último minuto del partido. La próxima jornada, los vitorianos viajará a tierras mañas para enfrentarse a Ebrosala, el domingo a partir de las 11.00 horas.

El Labastida, ante un muro Por su parte, tampoco le fueron bien las cosas al Labastida Rioja Alavesa, que en su visita a Santurtzi acabó perdiendo por 7 a 3. El partido se inició con Mulas, Xabi, Carlos y Montxo acompañados de Mollor bajo palos. Fueron los locales quienes abrieron el partido tras una jugada de estrategia y quienes gracias a una sorprendente efectividad llevar el 3-0 al marcador al descanso. En la segunda parte, los alaveses trataron de recortar distancias y meterse en la pelea con el gol de Litros, pero de nuevo la pegada de los vizcaínos con otros dos tantos seguidos sentenciaba el partido. A partir de ahí, la tónica del partido no cambió ni tan siquiera con la apuesta de los visitantes de llegar a los minutos finales con un ataque de cinco. El ataque riojano se estrelló contra la defensa vizcaína y no hubo mucho más de sí. Tras esta jornada, el Labastida Rioja Alavesa se centra ya en preparar el importante partido de la semana que viene ante el Villa de Murillo, donde lograr los tres puntos se antoja vital para seguir encarrilando la temporada. - DNA