Vitoria - Y el sueño se esfumó. No habrá para el Alavés B siguiente ronda de la fase final de la Copa Federación ni posibilidades de estirar la temporada un poco más con un premio tan especial como el copero. En el partido de vuelta celebrado ayer por la tarde en Ibaia, el filial del Glorioso solo pudo empatar a uno ante el Guadalajara, un resultado a la postre insuficiente tras el 2-1 del partido de ida disputado en el feudo de este conjunto de Segunda B, que ayer estrenaba entrenador, Félix Angel Arnáiz Lucas, tras la destitución el pasado fin de semana de Manolo Cano. Así pues, el filial albiazul deberá centrarse ahora exclusivamente en enderezar su irregular comienzo liguero en el grupo vasco de Tercera División.

Con el convencimiento real de poder darle la vuelta a la eliminatoria copera saltaron ayer los chicos de Robero Ochoa al césped de Ibaia. Jugaron de inicio Aritz, Ibáñez, Carbonell, Otto, Eguren, Erik, Altair, Jonan, Asier, Joseba y David, imprimiendo un ritmo de juego acorde a las necesidades de la eliminatoria que sin embargo no se tradujo en ocasiones de peligro. Es más, la primera y más clara llegó por parte del Guadalajara en el minuto 14, tras una falta botada por el conjunto visitante que Ablenque remató de cabeza picada al suelo y que Aritz no acertó a blocar. Ahí llegó el 0-1 que cayó como una losa sobre el filial y con el que el partido alcanzó el descanso.

Tras la reanudación, y con la única opción de quemar las naves en ataque, el Alavés B se volcó, gozando de hasta tres ocasiones clarísimas de gol de Asier Benito que fueron desbaratadas por un soberbio Kevin. Pero en la siguiente acometida, en el tramo final, Joseba lograba empatar el partido tras aprovecharse de un balón muerto en el área. El tanto dio algo de vida al filial pero la experiencia del Guadalajara terminó por entriar y matar la eliminatoria. - M. Uriarte