Copenhague - Como un cachorro herido. Así se plantó la selección española de balonmano en su duelo ante Rumanía, el tercero del Mundial de Dinamarca, después de caer dolorosamente el pasado lunes ante Rusia, una seria candidata al título. Como un perrillo que todavía cojeaba, las guerreras saltaron al parqué dubitativas, indecisas, irreconocibles. Y el combinado rival se aprovechó. Rumanía no era oponente para un conjunto estatal acostumbrado a las grandes gestas, pero las de Jorge Dueñas no parecían las de siempre. Así que su contrincante aceptó el regalo y comenzó a sangrar la portería defendida por Silvia Navarro. No se fueron en el marcador, las guerreras tampoco les dejaron tanto, pero el luminoso siempre tiró del lado rumano hasta final de la primera parte.

Fue entonces cuando Dueñas realizó un cambio en la portería. Entró Darly Zoqbi. Y las guerreras volvieron a ser las guerreras. El muro defensivo, base del éxito de esta selección, volvió a levantarse en torno a la portería estatal y, en la segunda mitad, tan solo recibieron seis goles. Seis dianas fueron capaces de efectuar las rumanas que, desesperadas, vieron como el marcador volteaba y se les iba de las manos. Arropado por la efectividad de Cabral y el buen hacer de Carmen Martín sobre los siete metros, el combinado estatal se fue haciendo con el control del luminoso, el ritmo del partido y hasta los aplausos de las gradas Así, en tan solo dos parciales -el último de la primera parte y el primero de la segunda mitad- España ya se supo vencedora del encuentro.

Un pie en octavos De esta forma, a pesar de la derrota encajada ante Rusia, las guerreras dan un paso de gigante hacia los octavos de final de este Mundial de Dinamarca. Sin embargo, todavía restan dos encuentros para finalizar esta primera fase en los que la selección de España deberá buscar sendas victorias para asegurarse un cruce más asequible en los enfrentamientos directos. El próximo duelo en la agenda será mañana (18.15 horas, Teledeporte) ante una débil Puerto Rico, donde una victoria dejaría a las de Jorge Dueñas prácticamente clasificadas para la siguiente ronda. Mientras que será el viernes (20.30 horas, Teledeporte) cuando las guerreras deban hacer frente a la selección favorita para llevarse el cetro mundial: la temible Noruega. Una prueba de fuego para medir el nivel del combinado estatal. - N. Marcos

España26

Rumanía18

ESPAÑA: Navarro, Carmen Martín (4, 1p), Elorza, Chávez (1), Lara González (1), Cabral (6) y Eli Pinedo (2) -equipo inicial- Zoqbi (ps), Marta López, Núñez, Nely Carla Alberto (2, 1p), Mangué, Aguilar (1), Pena (7, 1p), Egozkue (1) y Ainhoa Hernández (1)

RUMANÍA: Ungureabu, Nechita (2), Geiger (3), Bradeanu, Neagu (6), Ardean (2) y Manea (2) -equipo inicial- Munteanu (ps), Szucs, Pintea, Perianu, Marin, Tanasie, Buceschi (3, 1p), Vizitiu y Chiper.

Parciales: 1-4, 4-6, 7-8, 8-9, 9-12 y 13-12 (descanso) 16-12, 17-14, 20-15, 22-16, 24-18 y 26-18 (final).

Árbitros: Antic y Jakovljevic. Excluyeron por dos minutos a Lara González (2) por España; y a Szucs y Pintea por Rumanía.