bilbao - Las horas se desparraman entre los dedos de los finalistas del Cuatro y Medio y no queda apenas tiempo para parar a pensar. Ni Mikel Urrutikoetxea ni Juan Martínez de Irujo pueden hacer caso omiso a las mariposas, que, traviesas, residen en sus estómagos. Al delantero de Zaratamo, campeón del Manomanista, se le acumulan los trabajos por verse casi novato en estas lides -ya desaparecido cualquier tipo de aura de advenedizo que le pusieron los profanos con el Manomanista-, pero con el aroma a finalista puro y duro.

Sucede que junto a la explosión del delantero de Zaratamo se acodan sus virtudes en la cancha, espléndidas, con una forma de despejar la pelota, a base de muñeca, antebrazo y dirección, que desespera, y un remate aprendido, cada vez más estético; con un modo de afrontar los partidos con una sombra cada vez más larga. Más gigante. Más brutal. Se debe al gen ganador, por supuesto, pero también a la personalidad del de Zaratamo, que ha puesto los cimientos a su carrera en la humildad y el trabajo. La cátedra de campeones coincide: “Está aquí para quedarse”. Se refieren a la primera línea de la mano profesional, al Olimpo al que la mayoría solamente aspiran, todos anhelan y al que llegan muy pocos. Son habas contadas. El primer peldaño del escalón es para uno. La pirámide.

“Está aquí para quedarse”

Koteto Ezkurra (Doneztebe, 1973) es una leyenda del remonte y uno de los pelotaris más laureados en los últimos 25 años en todas las modalidades. El delantero navarro acumula en sus vitrinas once txapelas del Individual y cuatro de Parejas y está considerado por muchos el mejor de la historia junto a Jesús Ábrego, el mago de Arroitz. Confiesa el doneztebarra que “Mikel Urrutikoetxea es un pelotari que lleva tiempo arriba”. “Quizás entró de rebote en la final del Manomanista y dio la sorpresa, pero en el Cuatro y Medio se ha mostrado serio, constante y con muchas cualidades”, certifica Ezkurra, quien apostilla que “Mikel está en la élite para quedarse”.

A juicio del remontista, “hay que dejar que los pelotaris vayan creciendo y haciéndose. Sacar Irujos o Aimares es muy complicado. Hay que dar margen a pelotaris como Urruti, dejar que se hagan”. “Las empresas tienen a los pelotaris como a los limones: los exprimen y si no dan el jugo necesario, a la basura”, sentencia el doneztebarra.

Así las cosas, Ezkurra contempla en el vizcaino a un manista que ha “madurado y que tiene otra cabeza”. “En la actualidad, el vizcaino tiene otra forma de leer los partidos y se ha convertido en un pelotari de verdad. Yo le veo más consistente”. “Para mí, la autoconfianza hace mucho para creerte cuánto nivel puedes dar en la cancha. Ahora, domina los tiempos, no hay dientes de sierra, tiene continuidad y mentalidad ganadora. Hay Urruti para rato”, finaliza.

“Es humilde y trabajador”

Pablo Fusto (Buenos Aires, 1980) tiene cinco entorchados Individuales de pala y seis de Parejas. El pelotari argentino, un prodigio de técnica y fuerza, marca la pauta en el leño profesional y ha sido el dominador del mano a mano de los últimos cuatro años, en los que ha vestido el colorado de forma consecutiva y sin fisuras. Advierte el bonaerense que ve en Urrutikoetxea a un pelotari “centrado y que se concentra en lo que hace. Él conoce las posibilidades que tiene en los partidos y cómo tiene que explotarlas. Además, es respetuoso y humilde”, cuestiones que valora Fusto como esenciales para el crecimiento de un pelotari de su talla.

“El lado potente que tiene Mikel hace mucho daño y le viene perfecto para jugar. Tampoco transmite nervios y es frío. Eso es positivo. No es un pelotari arrebatado. Es un aliciente para el juego que despliega dentro de la cancha”, admite el puntillero argentino, quien concreta que “hay muchas cosas que determinan lo que hace a un deportista grande, entre las que entran las condiciones físicas y técnicas. Creo que la psicología cuenta mucho. El lado humilde de Mikel y cómo trabaja le hace ser más fuerte”. “Yo traslado el trabajo de Urrutikoetxea a mí mismo y hay que saber luchar, tener perseverancia y conocerse mucho. Hay que saber echar el dos paredes, sí; pero también cuándo, dónde, cómo y contra quién”, agrega Fusto. Analiza el bonaerense que “a todo eso ayuda la experiencia. A medida que uno va jugando más partidos importantes, tiene menos nervios y aprende a lidiar con ellos. Así te conoces a ti mismo como deportista”.

“Ya es uno de los gallos del campo profesional”

Esteban Gaubeka (Armintza, 1977) acumula en sus espaldas cuatro campeonatos Individuales de pala y otros cinco de Parejas. El Gallo es junto a Fusto el pelotari que ha marcado la pauta en la última década en el leño. Manifiesta sobre Urrutikoetxea que “ahora está entre los cuatro mejores de la mano profesional sin duda alguna, junto con Juan Martínez de Irujo, Aimar Olaizola y Oinatz Bengoetxea. Ya es uno de los gallos”. Desvela el delantero vizcaino que “aunque llegó a la final del Manomanista un poco de rebote, fue capaz de alcanzar las semifinales haciendo un buen campeonato y ganó la final de forma merecida. Además, en parejas está a gran nivel, de parte de Aimar Olaizola jugó mucho. Está arriba y lo ha demostrado”. El pelotari de Armintza incide en que “el nivel que ha rayado en todas las oportunidades que le ha dado su empresa ha ido creciendo y está con los mejores. Esta es su segunda final y es la de la consagración”.

Tal y como explica Gaubeka, a Urrutikoetxea se le ven trazas de un pelotari con mayor poso. “Pablo Berasaluze y Josetxu Areitio han trabajado con él para que crea en sí mismo. Tiene que tener en la cabeza que está en la final por méritos propios. Tiene que creer”, argumenta y añade que “por su forma de hablar se le nota más suelto y está más peleón dentro de la cancha. Es valiente. Parece que ha dicho: Aquí estoy yo”.

“Tiene una trayectoria larga por delante”

Iñaki Goikoetxea (Zumaia, 1980) es en la actualidad el puntista más laureado del panorama. Tiene once txapelas Individuales y cinco de Parejas, labradas desde que debutara en Milán en 1996. El guipuzcoano vaticina que “me decanto un poco más por Irujo por la experiencia, que es un grado en estas ocasiones. Lo que hace grandes a los pelotaris es el que mejor sabe estar en la cancha en los momentos puntuales que hay mucha tensión”. “Mikel es un pelotari que demostró contra Olaizola II que es grande. Es muy completo. Saldrá sin presión, relajado a la cancha y no tiene nada que perder. Tiene todo para ganar”, declara Iñaki.

Por otro lado, el campeón zumaiarra matiza que “el favorito tiene mucha presión. El que es favorito tiene una carga mayor. Si gana Irujo, podría ser hasta normal. Cuando pierde, le llegan los golpes”. Además, sobre el de Zaratamo asevera que “Urrutikoetxea es joven y esta final, pase lo que pase, significa que está entre los mejores. Tiene una trayectoria larga por delante y va a estar por mucho tiempo. Tiene pinta de que estará en muchas finales. Quizás no lo tenga tan claro para este año, porque Juan está a buen nivel. Aun así, tendrá que sudar mucho. A un partido, cualquiera puede ganar”.

“Se veía venir que iba a estar ahí arriba”

Julián Retegi (Eratsun, 1954) es el manista con mayor número de txapelas de la historia del profesionalismo. Las once del Manomanista, las cinco del Parejas y las cuatro del Cuatro y Medio le ponen en el primer puesto del ránking histórico. El expelotari contempla que “Urrutikoetxea lleva evolucionando desde que debutó. No diría que en su empresa apostaron demasiado fuerte por él, pero ha conseguido sumar. Es un pelotari muy fino, que siempre goza. Si jugara a pala, parecería que siempre le da con la yema. Empalma perfecto”. Y es que, el eratsundarra coincide en que “se veía venir que iba a ir para arriba. Siempre se ve con gente que es muy pelotari. Eso sí, la forma de entrar de gancho en los últimos partidos alumbra que ha cambiado de estilo de juego. Se ha adaptado”.

Sostiene Retegi que al actual campeón del Manomanista “el garrote que tiene le viene en el ADN por el empalme tan fácil que tiene de la pelota. El resto, le sale natural y con posturas bastante clásicas, pero había que apostar por él”. “El buen pelotari tiene que jugar arriba cuanto antes, porque este tipo de manistas, a los que se les ve que tienen cualidades para jugar, tienen que hacerlo. Y Mikel tiene esas cualidades”. Al fin y al cabo, tal y como narra el legendario pelotari navarro, “no tengo ninguna duda de que Urrutikoetxea se mantendrá arriba, pero para eso tiene que estar dentro de la cartelera de la empresa y luego el aficionado decidir”.

Asimismo, respecto al ímpetu del de Zaratamo, revela Retegi que “el carácter ganador lo ha tenido siempre, pero se ha transformado. Antes, en algunos encuentros parecía que se le acababa la fuerza y ahora, físicamente, está a un nivel espectacular”. Finaliza el eratsundarra que “no se le puede catalogar por ganar o perder, pero sí por sus cualidades, que son grandes”.