BILBAO. En la segunda sesión de la vista oral que se sigue en el Juzgado de lo Penal número 1 de Bilbao, han comparecido como testigos doce miembros de la tripulación que remó en la temporada 2009-2010, cuando presuntamente se administró a los remeros sustancias dopantes y prohibidas con el objetivo de mejorar el rendimiento deportivo.
Patrones y remeros han coincidido en que "nunca" les administraron sustancias por vía intravenosa, método no autorizado en el ámbito deportivo por las autoridades sanitarias y que, según la fiscal y un testigo protegido que declaró ayer, se utilizó aquella temporada en el club.
La mayor parte de la tripulación ha reconocido que durante la temporada de regatas el médico y la enfermera de Urdaibai les inyectaban varias veces a la semana, después de los entrenamientos y de las competiciones, sustancias para ayudar a su recuperación, y que se les administró solo por profusión intramuscular.
Sin embargo, el médico del club Borja Garay, que es el acusado para quién la fiscalía pide una pena mayor, reconoció que en alguna ocasión había puesto una vía intravenosa, después de competir, con suero y bicarbonato.
Los diez acusados, entre los que está Garay además del presidente de Urdaibai, Josu Zabalondo; el entrenador, José Manuel Francisco; y la ATS Arantza Ormaza, están siendo juzgados por actuar conjuntamente para adquirir y suministrar a los remeros sustancias prohibidas "destinadas a aumentar sus capacidades físicas, poniendo en grave riesgo la salud de los mismos".