Se trata de dos futbolistas legendarios. Fueron compañeros en la fabulosa selección brasileña que ganó en Tokio el Mundial de 2002, pero también fieros antagonistas por aquella época, en los clásicos entre el Real Madrid y el Barcelona. Ambos han dejado huella en la historia del deporte rey como zurdos de postín y ambos se resisten a pasar página pese a su provecta edad. Roberto Carlos da Silva cumplió el pasado 10 de abril 42 años y Víctor Borba Ferreira, Rivaldo, alcanzó los 43 el día 19 del mismo mes. Ambos, además, ya se habían retirado de las canchas de fútbol, actividad que sin embargo han retomado este mismo mes llevados por motivaciones muy diferentes.

Quien fue portentoso lateral izquierdo del Real Madrid, club con el que ganó tres Copas de Europa entre otros muchos trofeos durante once años, le mueve el dinero, no en vano lo ha dilapidado con la misma facilidad que lo supo ganar con sus portentosas cabalgadas por la banda y el cañonazo con el que percutía al balón en los lanzamientos de falta.

Rivaldo, en cambio, regresa por puro romanticismo. Para ayudar al Mogi Mirim, un club de fútbol brasileño encuadrado en el Campeonato Paulista y del cual es dueño y presidente. Se da la circunstancia, además, de que en este equipo juega Rivaldinho, uno de sus hijos. El pasado 15 de julio ocurrió un acontecimiento insólito: Un gol de Rivaldo y otros dos de Rivaldinho sirvieron para que el Mogi Mirim venciera por 3-1 al Macaé, encadenando tres victorias consecutivas tras once partidos sin vencer. El regreso de Patapalo, Balón de Oro y FIFA World Player en 1999 bajo el manto del Barça de Van Gaal, le sentó al Mogi de maravilla. “Volver a anotar tras quince meses parado y, además, jugar al lado de mi hijo, que hizo dos goles, me deja feliz”, afirmó.

Tras 26 temporadas como futbolista profesional formando parte de catorce clubes diferentes de Brasil, España, Italia, Grecia, Uzbekistán y Angola, Rivaldo había decidido colgar definitivamente las botas en marzo del año pasado, precisamente en su queridísimo Mogi Mirim, equipo en donde dio sus primeros pasos en los albores de los años noventa.

angola y la llamada de dios En realidad Rivaldo había desconectado del fútbol, digamos, serio, en 2011, ya con 39 años, con el Sao Paulo, donde jugó 30 partidos, aunque la mayoría incompletos, y marcó cinco goles. Para entonces su mente, físico y corazón estaban más puestos en su vocación religiosa. Eso le empujó a enrolarse en el Kabuscorp de Angola. “Tengo un Mundial, he sido el mejor del mundo, pero mi mejor trofeo es haber conocido a Dios y seguir su evangelio”, confesó. Porque además de jugar Rivaldo levantó una iglesia evangélica y un instituto de ayuda social, que también trabaja en Brasil, en un país que todavía sufría las secuelas de una larga y cruenta guerra civil.

El exjugador del Deportivo y Barcelona, que se levantaba a las seis de la mañana para empezar a entrenar a las ocho porque tardaba dos horas en recorrer 25 kilómetros, compartió sus desvelos religiosos y su aventura angoleña con su compañera de siempre, Rosa, con la que ha tenido cinco hijos.

el problema de roberto carlos La dimensión de Roberto Carlos es otra, muy distinta, sobre todo con las mujeres, una de los motivos que le han empujado a reanudar su carrera futbolística en la Superliga de India, donde también se ha apuntado otro ilustre como Del Piero (40 años), y militan Capdevilla, Luis García, Trezeguet, Anelka o Materazzi.

En unas insólitas y desafortunadas declaraciones realizadas el pasado año a la Gazzetta dello Sport, Roberto Carlos reveló que tenía ocho hijos con “seis o siete” mujeres diferentes con las que mantuvo relaciones sexuales. Además de no saber exactamente quienes son las madres de sus hijos, el futbolista tuvo el mal gusto de compararlas con los automóviles. “Con los coches me ocurre lo mismo que con los relojes y las mujeres: después de un tiempo, me canso”, comentó al ser preguntado por qué abandonó su lujoso Buggati Veyron, considerado el coche más rápido del mundo. El brasileño contó que optó por dejar el Buggati en su garaje de Madrid ya que sus mil caballos lo convierten en un vehículo muy peligroso para la conducción.

Roberto Carlos solo ha tenido dos esponsales. El divorcio con su primera mujer, a principios de 2003, le salió carísmo. Alexandra Pinheiro, con la que contrajo matrimonio en 1992, se quedó con la casa de La Moraleja y con la mitad de su fortuna. Después se entregó a una vida a todo tren, hasta que en 2009 se casó con la fisioterapeuta Mariana Lucón y, aparentemente, calmó su encendida vida sentimental.

Además de mantener a una considerable prole, Roberto Carlos es uno de los perjudicados en la reciente intervención del Banco de Madrid, donde tenía depositados inportantes fondos.

El jugador, que en principio firmó con el Delhi Dynamos como entrenador, también ejercerá como futbolista en un gigantesco país en donde el fútbol apenas balbucea e intenta buscar un hueco a la sombra del cricket.

Santa Cruz (Brasil) (1991-1992)

Mogi Mirim (Brasil) (1992-1994)

Corinthians (Brasil) (1993-1994)

Palmeiras (Brasil) (1994-1996)

Deportivo (España) (1996-1997)

Barcelona (España) (1997-2002)

Milan (Italia) (2002-2004)

Cruzeiro (Brasil) (2004)

Olympiacos Grecia (2004-2007)

AEK Atenas Grecia (2007-2008)

Bunyodkor (Uzbekistan) (2008-10)

Mogi Mirim (Brasil) (2010-2011)

São Paulo (Brasil) (2011)

Kabuscorp Sport (Angola) (2012)

São Caetano (Brasil) (2013)

Mogi Mirim (Brasil) (2014-2015)

Sao Paulo (Brasil) (1990-1992)

Atlético Mineiro (Brasil) (1992)

Palmeiras (Brasil) (1993-1995)

Inter de Milán (Italia) (1995-1996)

Real Madrid (España) (1996-2007)

Fenerbahçe (Turquía) (2007-2009)

Corinthians (Brasil) (2010-2011)

Anzhi (Rusia) (2011-12)

Delhi Dynamos (India) (2015-1016)

Anzhi Makhachkala (Rusia) (2012)

Sivasspor (Turquía) (2013-2014)

Akhisar B. (Turquía) (2015)

Al-Arabi (Catar) (2015)

Delhi Dynamos (India )2015-1016)