tolosa - “Lo importante era no notar dolor”, confesaba Andoni Aretxabaleta ayer en el frontón Beotibar de Tolosa. Era su anhelo. Era lo que necesitaba. Era la X de la ecuación de Asegarce para programar todo el fin de semana del Parejas, puesto que la decisión tomada por el markinarra podría derivar en un efecto dominó con influencia además en el festival del domingo en el Bizkaia de Bilbao. Y es que, Mikel Urrutikoetxea tuvo que seleccionar pelotas el miércoles en la cancha de Miribilla con la incertidumbre de quién iba a ser su zaguero en la cita ante Pablo Berasaluze y Aitor Zubieta, segundos en la tabla clasificatoria.
Era la decisión de Aretxabaleta el principio y el fin de las cábalas. Si no jugaba, entrarían en escena Ladis Galarza, rumbo a Bilbao, y Álvaro Untoria, quien iba a jugar con Oinatz Bengoetxea, como ya hizo en Tafalla de modo satisfactorio. Pero el guardaespaldas vizcaino, en la elección doble del Beotibar, trató de probarse y se retiró con buenas sensaciones. “La prueba ha ido bastante bien”, manifestó el pelotari, quien agregó que “lo importante era no notar dolores”. Y es que, con la mano tocada, ya se ha perdido dos encuentros del presente Parejas: el de la segunda jornada ante Altuna III-Merino II, donde actuó Ibai Zabala con victoria (22-19), y el del domingo pasado, que también ganó Oinatz con Untoria ante Retegi Bi-Rezusta (22-15). Confesó el vizcaíno que “no he gozado mucho”, pero puso el acento en haber esquivado las molestias para afrontar con garantías el enfrentamiento del lunes en Tolosa contra los guipuzcoanos Iñaki Artola y Jon Ander Albisu, situados en el tercer peldaño de la clasificación del campeonato con buenas sensaciones y cinco victorias, al igual que Martínez de Irujo y Barriola. A una están situados el delantero de Leitza, quien está cuajando envites de galones y genio, y el zaguero de Markina. Si ganan, se meten directos en la pelea por las semifinales, en las que aparentemente solamente hay cinco duetos en liza -Ezkurdia-Zabaleta, Berasaluze II-Zubieta, Artola-Albisu, Irujo-Barriola y ellos mismos-, aunque la derrota no sería capital. Hay posibilidad de reacción a cinco jornadas del final de la liguilla de cuartos.
Así las cosas, el efecto dominó de la recuperación de Aretxabaleta coloca a Álvaro Untoria en el Bizkaia de Bilbao. El najerino, que aprovechó el domingo en Tafalla su primera oportunidad en Primera, será el reemplazo de Mikel Beroiz y acompañará a Mikel Urrutikoetxea en su primera mezcla juntos. Nunca han jugado como binomio. Compartirán gerriko azul los jóvenes de Asegarce, que tienen más por ganar que por perder. De este modo, como el manista de La Rioja está inmerso en el Parejas de Segunda, no disputará el encuentro que tenía previsto con Iker Tainta en el torneo de plata en Miribilla. Su lugar lo ocupará el zornotzarra Iñaki Iza. Respecto al material seleccionado para la cita, Oinatz y Andoni eligieron pelotas de 104,4, 104,1 y 104,8 gramos, mientras que Artola y Albisu se decantaron por tres de 105,6, 105,5 y 105,4, respectivamente.
sin retegi Bi Por otro lado, después de las probaturas y del apartado de cueros de los de Asegarce, llegó el turno de los protagonistas del encuentro del martes carnavalero tolosarra. Xala y Merino prefirieron un lote de 105,2, 104 y 104,4 gramos, mientras que Rezusta, quien estuvo solo porque Retegi Bi tenía un problema personal, seleccionó otro de 105,8, 105,3 y 106,2. “Estamos contentos. Las nuestras son pelotas que dan tiempo para ponerse y las de ellos son más rápidas”, analizó el zaguero zurdo de Bergara.
Lo cierto es que será un partido de necesidades. Los dos binomios tienen que ganar “sí o sí”, como afirma Rezusta, quien agrega que “estoy bien de manos. Cuando te reenganchas después de una lesión suele costar volver a coger el ritmo del principio. Tenemos que volver a la dinámica de los primeros choques y volver a la senda de la victoria”. No hay colchón. No hay red.
Por su parte, David Merino explica que “de manos y físicamente estoy bien. Lo que pasa es que cuando llego a la mitad del partido me falta ritmo y estoy sin confianza. Me exijo demasiado a mí mismo y es la razón fundamental”.