España38
Bielorrusia33
ESPAÑA Sierra (p), Rocas (5, 3p), Maqueda (6), Morros, Guardiola (1), Cañellas (5) y Ugalde (1) -siete inicial-; También jugaron Pérez de Vargas (ps), Tomás (4), Dujshebaev (3), Entrerríos (3), Aginagalde (6), Chema Rodríguez (1), Rivera (1) y García (2).
BIELORRUSIA Charapenka, D. Rutenka (2), Pukohouski (4, 1p), Shylovich, S. Rutenka (1), Tsitou (5) y Babichev (4) -siete inicial-. También jugaron Matskevich (ps) Brouka (1), Kamyshyk (3), Nikulenkau (3), Shylovich (4), Shumak (4), Kniazeu (1), Baranau (1) y Chystabayeu.
Marcador cada cinco minutos 3-3, 8-5, 10-7, 15-10, 17-13, 21-17 (descanso); 25-21, 28-23, 29-26, 32-30, 35-31 y 38-33 (final).
Árbitros J. Novotny y V. Horacek (RCH). Excluyeron a Ugalde y Viran Morros por España, y a Babychev (2) y Shumak, por Bielorrusia. Expulsaron con roja directa a Siarhei Rutenka y Shumak.
Pabellón Duhail Handball Sports Hall, ante unos 500 espectadores.
doha - La selección española de balonmano arrancó la defensa del título mundial que conquistó hace dos años con una victoria (38-33) sobre Bielorrusia, en un encuentro en el que el joven portero Gonzalo Pérez de Vargas se encargó finalmente de espantar las dudas que el propio conjunto español se empeñó en crear. A los hispanos les costó entrar en el partido. Al menos en defensa, como demuestran los cuatro tantos (4-4) que el conjunto español encajó en los primeros seis minutos de juego, todos ellos calcados, con un jugador bielorruso ganando la espalda a los defensores españoles en los seis metros. Curiosamente, cuando todo el mundo temía los poderosos lanzamientos de Siarhei Rutenka -que no firmó su primer gol hasta los once minutos- el mayor peligro del conjunto bielorruso llegaba con los desdoblamientos del extremo Aliaksandr Tsitou. Las paradas de José Manuel Sierra despejaron las dudas que había dejado durante la fase de preparación y en ataque se encontraron muy activos el pivote Julen Aginagalde, Jorge Maqueda desde el exterior y un inconmensurable Joan Cañellas, elegido mejor jugador del partido, y que ayer actuó en el lateral izquierdo.
Bielorrusia se quedó sin su estrella, Rutenka, que vio en el tramo final de la primera parte la roja directa por un feo golpe a Viran Morros en un contragolpe del equipo español. España se mostró dubitativa en el aspecto defensivo, donde nunca dio la impresión de ajustar totalmente su sistema, burlado una y otra vez por los bielorrusos. El joven portero Pérez de Vargas, con cuatro buenas paradas en los diez minutos finales, fue uno de los máximos responsables de que se ratificase un triunfo que la propia España se empeñó en cuestionar.
Sin tiempo casi de digerir este triunfo, los hispanos se medirán hoy a Brasil (15.00 h, (Teledeporte), en la segunda jornada del mundial. - Efe