pamplona - El cartón 14 señaló la frontera. El límite de Víctor Esteban. El riojano solo aguantó hasta el 14-14, a partir de ahí el juego de Jokin Altuna se impuso. Los dos pelotaris hicieron vibrar al público con un juego de muchos quilates durante los primeros pelotazos. Pero, a partir del decimocuarto tanto, el riojano ya no pudo más. Completamente descolocado, el delantero de Amezketa supo aprovechar la ocasión y consiguió una victoria que le da el pase a su primera final, solo cinco meses después de haber debutado.
Los dos pelotaris salieron dispuestos a dejarse la piel sobre la cancha. Los manistas trataron de imponer su juego, Altuna quiso mantener al riojano lejos del frontis, intentando enredarle con el juego a bote pero sin descartar buscar el gancho. Por su parte, Víctor trató de acabar cuanto antes. Saque y remate. El delantero de Ezcaray sacó el mayor rédito posible a una pelota veloz y consiguió hacerle mucho daño a Jokin con el disparo inicial, además, gracias a su potente volea obtuvo varios tantos que le dieron una pequeña ventaja dentro de un duelo en el que los aciertos superaron ampliamente a los errores.
Con 13-9 en el marcador, los fantasmas volvieron a asomarse sobre Altuna. En otras ocasiones, cuando pintaron bastos, el guipuzcoano bajó los brazos antes de tiempo y acabó regalando la victoria con más facilidad de la esperada. Pero ayer Jokin demostró que ha aprendido la lección. A pesar de tener el marcador en contra, Altuna no se vino abajo y siguió constante en su juego. Un esfuerzo que tuvo su recompensa.
Así, los tantos cayeron hacia el lado azul sin parar. Víctor, fuera de sí, no supo cómo contrarrestar el juego del guipuzcoano y encajó un parcial de 1-13 que le dejó fuera del Cuatro y Medio de Segunda y a Altuna, visiblemente emocionado, camino a la final. - J. V. L.