PAmplona - Ekaitz Saralegi tiene un gran dilema. El delantero de Amezketa se juega el sábado en el frontón Labrit de Pamplona el pase a las semifinales del Cuatro y Medio de la LEP.M, pero el pasado 2 de noviembre se rompió el dedo corazón de su mano izquierda y todavía no sabe si podrá participar en un partido que, si lo juega, le va a enfrentar con Juan Martínez de Irujo. Sin embargo, hoy pondrá solución al enigma. Así lo desveló ayer en la elección de material previa al duelo, un acto en el que escogió pelotas sin ponerse taco en su mano izquierda, en la que lució un dedal para proteger la punta de su maltrecho dedo corazón izquierdo. Hoy tiene previsto realizar una prueba en Tolosa para tomar la decisión definitivo. Y no se anduvo por las ramas: “Si no me duele, voy a jugar; si me duele, seguro que no. Ya lo dije en su día y lo mantengo”. “He notado un poco de mejoría. La inflamación ha bajado y se nota, pero lo que más me duele es la punta y ahí no he notado mucha diferencia. Es lo que se me ha roto, todavía no se ha sujetado y hay que esperar”, señaló. Pero el tiempo se agota. “Físicamente estoy bien”, matizó, “pero al final son ya diez días dándole vueltas a la cabeza y ya tengo ganas de que llegue mañana (por hoy) para decidir si juego o no”.

Saralegi será semifinalista si el sábado logra al menos 18 tantos en su partico contra Irujo, pero también podría pasar de ronda si Retegi es capaz de derrotar a Xala mañana. El amezketarra tendría así la oportunidad de esperar al resultado de este encuentro para tomar una decisión sobre su participación en el partido del sábado en el Labrit, pero ayer volvió a ofrecer una sobresaliente lección de honestidad. “Muchos me han dicho que, si gana Julen, decida no jugar, pero hay que ser respetuosos con el público. La gente compra entradas, viene, hace planes y hay que respetar. Desde el primer día dije que iba a probar el jueves y así lo haré”, explicó.

Irujo no se fía También descartó Saralegi la posibilidad de actuar el sábado únicamente con su mano derecha. “No contemplo esa opción. No quiero hacer el ridículo con el frontón lleno”, aclaró. Y es que el amezketarra es consciente de que se enfrenta a un rival temible, un Juan Martínez de Irujo que se mostró convencido de que habrá partido. “Estoy convencido de que el sábado vamos a jugar, así que llevo preparando este partido toda la semana. Una vez que tome la decisión de jugar se olvidará del dedo y se centrará en el partido para clasificarse”, aseguró el delantero de Ibero, que aclaró que, “si Saralegi sale a jugar, será porque se ve en condiciones”. Irujo, que el sábado necesita ganar por al menos cinco tantos de diferencia, confirmó que no pensará en los problemas de su rival. “Si me centro en jugarle solo a la izquierda, será malo para mí. Tengo que centrarme en mi juego, en ganar y en dejarle en 17”, señaló.