R.MADRID Rivers (5), Rudy (5), Ayón (10), Llull (7) y Bourousis (8) -equipo inicial-, Nocioni (7), Campazzo (2), Maciulis (9), Reyes (11), Rodríguez (9), Carroll (7) y Slaughter.

ZALGIRIS Lekavicius (8), Lipkevicius, Jankunas (5), Javtokas (4) y Anderson (19) -equipo inicial-, Vene, Gudaitis (6), Kariniauskas (5), Songaila (8), Milaknis (13), Dimsa (2) y Ulanovas (1).

Parciales 13-14; 19-21; 24-14; 24-22

Árbitros Fernando Rocha (POR), Srdan Dozai (CRO) y Tomasz Trawicki (POL). Sin eliminados.

Pabellón Palacio de Deportes. 8.824 espectadores.

MADRID - El Real Madrid demostró anoche estar faltó de ritmo y chispa y sufrió para conseguir la victoria ante el Zalgiris, 80-71, en la jornada inaugural de la Euroliga dentro del grupo A. Al equipo de Pablo Laso le costó arrancar mucho más de lo que podía suponerse. El primer partido de cualquier competición siempre es más raro de lo que luego es normal, pero al Madrid se le atragantó desde el principio.

Ni defensa, ni ataque, ni fuerza, ni ideas, ni nada. Ese fue el bagaje del Real Madrid en los primeros veinte minutos de partido. Pablo Laso no consiguió dar con la tecla precisa para reactivar al equipo y el juego, salvo pequeños chispazos, languideció. El marcador casi siempre fue favorable a un Zalgiris aseado en su puesta en escena y que fue creciendo ante la nulidad de su anfitrión. Del 5-9 (min.4,30) se pasó a un paupérrimo 13-14 con el que finalizó el primer cuarto.

En el inicio del segundo, el Madrid pareció reaccionar de la mano del ‘Chacho’ Rodríguez y Felipe Reyes, 18-14 (min. 11,30), pero fue un mero espejismo y los lituanos volvieron a mandar en el luminoso poco después, 25-31 (min. 16,30).

Un Madrid sin alma, sin velocidad, que pareció jugar con el freno de mano puesto, no encontró la manera de arrancar. Ni una asistencia de fantasía de ‘Chacho’, que malogró Ioannis Bourousis y que fue lo único plausible desde las gradas (30-31, min.18) pudo abrir el camino. Así las cosas, el 32-35 con el que se llegó al descanso fue lo mejor de todo para el Real Madrid, porque caso de haber tenido como un rival un equipo con más enjundia, seguramente el resultado hubiera sido mucho más peliagudo.

El paso por vestuarios fue largo para los jugadores de Laso. Mucho debió hablar el entrenador porque los protagonistas tardaron en saltar al parqué.

Y mucho tardaron, dicho sea de paso, en reaccionar en el tercer periodo. Bourousis empató a 39 (min. 23,30), con el equipo dando leves síntomas de mejoría al menos en defensa, y en el minuto 25 anotó el 43-39, la máxima ventaja local hasta ese momento.

La falta de puntería en el tiro de personal ayudó y mucho a que el Real Madrid acabara el tercer cuarto con una ventaja de 7 puntos, 56-49.

Jonas Maciulis, ya se sabe eso de la cuña de la misma madera, comenzó el último cuarto clavando un triple a sus compatriotas que significó poner el primer doble guarismo a la ventaja, 59-49, y abrir de par en par la posibilidad de la victoria.

El Zalgiris, que se había mostrado como un equipo discreto hasta el momento de la verdad, comenzó a sentir como le temblaban las piernas y se le nublaba la vista. Sólo James Anderson, el mejor jugador del partido, mantuvo el nivel.

Los locales aprovecharon la inercia de la ventaja obtenida para anotarse la primera victoria por 80-71. Sin brillantez y sufriendo, pero ganaron. Y seguro que tomaron conciencia de que deberán mejorar mucho de aquí en adelante.

TRIUNFO DEL BARÇA El FC Barcelona se estrenó en la Euroliga 2014-15 con una apurada victoria en el Palau Blaugrana ante el correosos Bayern de Múnich. Los dos equipos futboleros brindaron un buen espectáculo en un choque muy igualado con ventajas máximas de apenas cuatro puntos para una y otra escuadra. El expreparador blaugrana Svetislav Pesic tuvo contra las cuerdas a su colega Xavi Pascual hasta que la calidad y la mayor profundidad del banquillo culé decantaron el triunfo del lado catalán, uno de los máximos aspirantes al título continental. - Efe