Barcelona - La admisión a trámite de una querella contra impulsada por el socio Jordi Cases, solicitando a Sandro Rosell una aclaración sobre lo que consideraba apropiación indebida por distracción en el fichaje de Neymar desencadenó la dimisión de Sandro Rosell como presidente del Barça, cargo al que accedió el 1 de julio de 2010 y finalizó el pasado 23 de enero. Aunque la querella de Cases fue exclusivamente contra el propio Rosell, el presidente argumentó en sus razonamientos para dejar el cargo su determinación de no involucrar al club con el proceso judicial.
Rosell consideró injusto que su esfuerzo por traer a Neymar al Barça no sólo no haya sido valorado sino que haya servido para ponerle bajo sospecha y en manos de la justicia.
Rosell, además, valoró el desgaste personal y familiar que le estaba provocando el cargo. - DNA