Bilbao. Michael Schumacher fue sometido a una segunda intervención quirúrgica la noche del lunes y presenta "una ligera mejoría" aunque todavía su vida corre peligro, tal y como informaron tanto el martes como el miércoles los responsables del hospital de Grenoble, donde permanece ingresado desde el domingo, cuando el expiloto de Fórmula 1 sufrió un fuerte golpe en la cabeza esquiando que le dejó en coma.
El lunes por la tarde un nuevo escáner evidenció que el estado de Schumacher había mejorado mínimamente respecto las pruebas anteriores y los médicos propusieron a la familia del siete veces campeón de la F-1 realizar una nueva intervención que duró dos horas. Gracias a ella se pudo evacuar "sin riesgos" un hematoma situado en el área izquierda del cerebro y se le instaló un dispositivo para hacer disminuir la presión intracraneal.
El martes por la mañana se realizó otro escáner que evidenció "una ligera mejoría" gracias a la intervención y, según los galenos, Schumacher se muestra "relativamente estable aunque todavía hay muchas hemorragias" cerebrales. El jefe de neurocirugía del centro de Grenoble, Emanuel Gay, declaró que "las próximas horas son cruciales" y que habrá que estar pendiente de su estado "crítico y frágil".
Con esta operación, los médicos dicen que han "ganado un poco de tiempo en su evolución" y no se atreven a vaticinar qué puede pasar en los próximos días porque "todavía queda mucho camino por andar". Ante las preguntas de los medios, los responsables del hospital se apresuraron a puntualizar que el alemán recibe el mismo trato que reciben el resto de pacientes.
"Menos preocupados" Michael Schumacher cuenta estos días con la compañía de sus familiares más cercanos. Su esposa, Corinna, así como sus hijos, Gina María y Mick de 16 y 14 años, respectivamente, y su hermano Ralf, que también fue piloto de F-1, están en el hospital pendientes de cómo evoluciona su estado de salud. La familia también está arropada por el cirujano francés Gerard Saillant, íntimo amigo del expiloto. Él es quien está ejerciendo de portavoz de la familia. "No se puede decir que esté ganado. Hay altibajos", explicaba a los medios, "hoy (por el martes) está un poco mejor que ayer y mejor que el domingo. Estamos un poco menos preocupados que hace 24 horas, pero puede cambiar de un día a otro".
El periódico alemán Bild ha publicado informaciones en las que aseguraba que el casco protector que llevaba puesto Schumacher, de quien se dice que no esquiaba a gran velocidad, en el momento del accidente se quebró por efecto del violento impacto de su cabeza contra una roca. Uno de los miembros del equipo de rescate afirma que, cuando llegaron al lugar del accidente, encontraron "su casco partido y se podía ver mucha sangre".
Periodista disfrazado de cura El entorno de Michael Schumacher insistió ayer en pedir respecto a la privacidad de la familia, en los críticos momentos que atraviesa esta por el accidente del heptacampeón mundial, tras interceptarse a un periodista disfrazado de cura que pretendía entrar en el hospital donde está ingresado.