Vitoria. Como ellos mismos se encargan de poner de relieve habitualmente, los hermanos Pou se mueven "más que los precios" y cuando todavía no han presentado públicamente el resultado de su último trabajo, están planificando ya sus siguientes desafíos. Y dentro de estos, merece una mención especial el importante reto que se han marcado para la próxima primavera y que tendrá por escenario nada menos que la mítica cordillera del Himalaya. En principio, los escaladores vitorianos habían planificado este trabajo para el 2013 que está a punto de concluir pero unos inoportunos problemas físicos -en la rodilla y el hombro- que afectaron a Eneko les obligaron a trasladarlo a los primeros meses del año que viene.
Todo ello fue anunciado ayer por los propios protagonistas en Vitoria durante un acto en el que repasaron sus principales logros de los últimos meses y esbozaron las líneas maestras de lo que les espera en el futuro a corto y medio plazo. De todo ello, esta expedición a una montaña cuya identidad concreta no quisieron desvelar pero de la que sí ofrecieron algunos detalles -"está en la India y tiene entre 6.500 y 7.000 metros"- es sin duda el plato fuerte. Porque a la dificultad propia de las escaladas que afrontan habitualmente Iker y Eneko se le sumará en esta oportunidad las complejidades específicas de acometer este desafío en un medio tan hostil y peligrosos como el Himalaya.
Para conocer el resultado de esta expedición habrá que esperar todavía unos cuantos meses pero mucho menos tardará en ver la luz de manera oficial el resultado de su reto más reciente. De esta manera, pasado mañana jueves los hermanos Pou presentarán los espectaculares frutos de sus últimas jornadas de trabajo por tierras catalanas.
Pero como no todo en esta vida es trabajar, Iker y Eneko también tienen tiempo de vez en cuando para un poco de merecido descanso. Y nada mejor que acompañarlo con el reconocimiento de los que se dedican con la misma pasión que ellos al mundo de la montaña. De esta manera, el pasado sábado recogieron en Madrid el premio que concede la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada a toda una trayectoria. Un galardón que reconoce su mérito deportivo a lo largo de dos décadas y su actitud ejemplar en la montaña.
"La verdad es que estamos muy, muy contentos aunque nos sorprendimos un poco cuando nos lo comunicaron. Normalmente este premio se le suele dar a gente de sesenta años para arriba así que no sabemos si es que nos quieren jubilar antes de tiempo pero no lo vamos a hacer. Ya les avisamos que nuestro objetivo ahora es volver a ganarlo dentro de treinta años", bromeó Eneko.
No obstante, no todo son alegrías para los escaladores vitorianos. Y es que pese a su excelente rendimiento deportivo no encuentran quien apueste por ellos en casa. "No contamos con un solo patrocinador ni público ni privado en Euskadi", lamentaron.