SUDÁFRICA Khune, Ngconga, Khumalo (Xulu, min. 46), Nthethe, Matlaba, Furman, Jali (Mokotjo, min. 49), Manyisa (Zungu, min. 61), Claasen (Tshabalala, min. 46), Parker (Patosi, min. 90) y Rantie.
ESPAÑA Casillas (Valdés, min. 46, Reina, min. 80); Arbeloa, Ramos, Albiol, Monreal; Busquets, Xabi Alonso (Navas, min. 62); Iniesta (Koke, min. 74), Pedro (Mata, min. 62), Villa (Negredo, min. 59); y Llorente (Cazorla, min. 46).
Gol 1-0, min. 56. Parker
Árbitro Osias W. Koto (SDA). Amonestó a Tshabalala (min.86), por Sudáfrica.
Estadio Partido disputado en el Soccer City, ante 36.000 espectadores. El capitán Iker Casillas levantó la copa de campeones del mundo en los prolegómenos del partido.
madrid. Sudáfrica saboreó ayer un momento histórico al derrotar a la selección campeona del mundo (1-0), una España desconocida que convirtió la fiesta del regreso al escenario del éxito en uno de los peores choques de la era Del Bosque. El seleccionador quiso homenajear a los que fueron campeones. Diez de los once titulares disfrutaron de la mejor experiencia de sus carreras en Sudáfrica. Todos, menos Nacho Monreal.
España no pisó el acelerador. Y eso que tenía a su guardia de oro, con el reencuentro de Xabi Alonso y Sergio Busquets ocho meses después. Iniesta, el protagonista de aquella final, dejó detalles de brillantez, pero nadie le acompañó.
España salió con una variación en el sistema por el deseo de Del Bosque de juntar a los campeones. Jugó con tres delanteros y un nueve puro como Fernando Llorente, que desperdició una oportunidad de las que no tendrá muchas entre tanta competencia. Sin embargo, a la selección le faltó ritmo y ambición. Creer en lo que jugaba. Ir hacia adelante como equipo. Jugó caminando y hoy en día así no se gana a nadie por mucha diferencia de nivel que exista.
La movilidad de Villa y Pedro cayó continuamente en fuera de juego. Goles bien anulados. Monreal pudo anotar más tarde, pero su zurdazo en carrera lo sacó Khune con las piernas. Precedió a un fallo de Raúl Albiol que costó caro. Perdió el balón en la salida, pegado a la banda derecha, y cuando España quiso reaccionar, Sudáfrica ya había explotado su velocidad. Parker entró como una bala y definió con calidad, picando el balón a la salida de Víctor Valdés. El portero azulgrana se retiró lesionado del terreno de juego en la segunda mitad, cuando España ya había realizado los seis cambios. Arbeloa se enfundó la camiseta de guardameta, pero finalmente pudo salir Reina, pese la disconformidad de Igesund, encarado con el banquillo de la selección, que apelaba al fair-play.
Para Sudáfrica no era un amistoso y tenían la posibilidad de tumbar al campeón. Y lo hicieron pese a las paradas de Reina, que sacó dos claras a Rantie y evitó que el batacazo fuese aún más sonrojante. España no está hecha para amistosos.