Solares. El podio de Peña Cabarga no era lo que parecía. Se subió Vincenzo Nibali para que le pusieran el maillot rojo de líder que siempre genera la mayor de las sonrisas, pero su carita? No se sentía líder de la Vuelta el italiano. Lo dijo poco después. "Si Horner no tiene una crisis, será difícil ganarle", aseguró alabando la exhibición de su rival americano en la montaña y vistiéndose, de paso, de víctima, la piel de cordero. Donde había dicho antes que el Angliru no le venía bien al estilo del americano, que sube de pie y con mucho desarrollo, dijo ayer lo contrario. Que le ve ganador allí porque lo de Peña Cabarga había sido una muestra, la antesala, de lo que puede ocurrir mañana en el puerto más duro de la Vuelta. O Nibali dice lo que piensa o miente para apurar sus opciones de ganar la Vuelta.

Horner, que lleva días pensando que puede ganarla y que podía empezar a hacerlo en Peña Cabarga, dio ayer un enorme paso adelante en la clasificación y un pequeño paso atrás en su determinación. Se moderó cuando dijo que estaban todos muy apretados cuando la realidad es que Valverde, a 1:09 de Nibali y Purito, a 2:24, están demasiado lejos y también cuando habló de que hubiese preferido vestirse de líder porque es más fácil seguir a un rival que atacarle, como si ayer le hubiese costado la vida despegar a sus tres rivales en Peña Cabarga. "Ahora", acabó diciendo, "todo lo que necesito es una pequeña ventana de oportunidad para ganar la Vuelta". Y tan pequeña.

Euskaltel, por equipos y? Sus posibilidades pasan por el Angliru, aunque hoy la etapa sube hasta el Naranco, donde no solo está en juego el liderato que persigue Horner y defiende Nibali, sino el triunfo de etapa que desean muchos, entre ellos Euskaltel, que afronta la jornada de hoy como si en realidad fuese la última. Samuel, que llega a Oviedo, es la bala en la que piensa Gerrikagoitia para conquistar una victoria con la que despedir, ahora que se extingue, las dos décadas de existencia del equipo. Lo de luchar por ganar en el Angliru es otra cosa. Lo ve complicado el director vizcaino, aunque teniendo a Antón? Quién sabe.

Lo que sí sabe Gerrikagoitia es que uno de los objetivos prioritarios en las dos etapas que quedan es no dejar escapar la general por equipos que comanda con 4:35 de ventaja sobre el Movistar y 6:17 respecto al Astana. Sería la primera vez que Euskaltel, o antes el Equipo Euskadi, se impone en la general por equipos de una grande.