escocia. Se desinfló Miguel Ángel Jiménez, el líder de 49 años, y se hinchó nuevamente el globo de Tiger Woods en la tercera ronda del Open Británico para apretar la tecla de on en la calculadora del Grand Slam: el estadounidense es segundo, a dos golpes del líder Lee Westwood. El cálculo que se elabora sobre Tiger, de 37 años, entraña que, a 18 hoyos del final del calvario del torneo -solo tres hombres caminan bajo el par-, atacará hoy a su cuarta Jarra de Clarete y su decimoquinto título de Grand Slam. Tiger ha hecho dos guiños: uno a su novia, la esquiadora Lindsey Vonn, pues a su lado y en Escocia se ha reencontrado con el amor y con su mejor swing; y otro a su cuentakilómetros del Grand Slam, parado en 14, a cuatro del récord absoluto en poder de Nicklaus. El mejor jugador del mundo flota suavemente en Muirfield pese a las dificultades. Una de las más voluminosas es Westwood, quien le mandó un aviso serio de que él también está ante la gran oportunidad.