FRANCIA. Contador se benefició de un abanico formado por el equipo Saxo-Tinkoff a 31 kilómetros del final, lo que le permitió reducir tiempo con Froome.

El jefe de filas del Saxo ganó una plaza en la general y es tercero a 2:45 de Froome y a solo 17 segundos del holandés Bauke Mollema (Belkin), que se metió en el grupo cortado por el Saxo.

El damnificado de la jornada fue Alejandro Valverde, víctima de un pinchazo en el kilómetro 80 de carrera, en un momento difícil y cuyas consecuencias fueron terribles.

El ciclista del Movistar acabó cediendo casi 10 minutos y pasó de ser segundo en la general a decir adiós a toda opción de subir al podio de los Campos Elíseos.

Valverde pinchó cuando el pelotón de los favoritos era un tren de alta velocidad lanzado por el Omega de Cavendish para distanciar a Kittel, que se había quedado cortado.

Sin compañeros, el líder del Movistar se quedó distanciado y vio como su vagón partía a un ritmo infernal.

La reacción del Movistar fue inútil, porque adelante a los Omega se sumaron los Belkin de Mollema, que no desperdiciaron la ocasión de distanciar a un rival directo por el podio.

La etapa se convirtió en un combate entre el equipo español y la suma de fuerzas de los belgas de Omega, que seguían rodando para Cavendish, y los holandeses de Belkin.

Hasta que el combate, de desiguales fuerzas, dejó "k.o." a Valverde, que arrojó la toalla.

Entre tanto, en el grupo de los favoritos, Saxo preparó su golpe de efecto, una maniobra minuciosa que llevaron a cabo con precisión quirúrgica y que dejó cortado a Froome. Fue la primera buena noticia de este Tour para Alberto Contador.

La operación puso de manifiesto lo que ya había quedado apuntado en la segunda etapa pirenaica, que el Sky es un equipo débil y que Froome tendrá que contar más con sus fuerzas que con la colaboración de sus gregarios.

El Saxo tiró con brío de su líder mientras que Froome tuvo que apoyarse en otros conjuntos, casi desprovisto de compañeros que le hicieran el trabajo.

Fueron 30 kilómetros frenéticos, impensables al inicio de una etapa que se preveía de transición y que acabó siendo de gran altura.

Al final, Froome acabó cediendo un tiempo que da vida a un Tour de Francia que el británico parecía controlado.

En la meta la victoria fue clara de Cavendish por delante del eslovaco Peter Sagan (Cannondale), que se vio sorprendido.

El ciclista de la Isla de Man logra así su victoria 25 y empata con el francés André Leducq como el tercer ciclista que más triunfos ha logrado en la ronda gala, solo superado por Bernard Hinault (28) y el belga Eddy Merckx (34).