motociclismo

Lorenzo, Pedrosa, Rossi y Márquez se retan en un territorio desconocido

Austin (Texas) acoge este fin de semana el novedoso gran premio de las Américas

madrid. El circuito de Austin, en Texas, será el escenario este domingo de la segunda prueba del Mundial de Motociclismo, una carrera que se presenta desconocida para la casi totalidad de sus participantes, lo que aumenta la emoción sobre todo en la categoría de MotoGP, donde Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa, Marc Márquez y Valentino Rossi prometen espectáculo.

Después del estreno bajo los focos del trazado catarí de Losail, ahora le toca el turno a otra carrera especial, más que nada por estrenarse en el calendario motociclista, y que sólo han podido conocer cinco privilegiados, todos ellos de la categoría reina, en un test privado en febrero que reunió a las dos Yamaha oficiales, a las dos Hondas oficiales y a la Honda del alemán Stefan Bradl. El resto no ha rodado en la pista americana, por lo que las cosas se pueden apretar ante la sorpresa.

El primer Gran Premio del año trajo espectáculo en MotoGP. Lorenzo demostró sus galones de actual campeón del mundo, Rossi volvió a acercarse al de antaño, Márquez dio un paso más adelante para ser considerado como serio aspirante, y Pedrosa fue el único que falló, por lo que es el que más obligado acude a Austin, de cara a no desengancharse desde el principio.

Las M1 de Yamaha dejaron claro su potencial y que no estaban tan por detrás de las Honda como se podía presuponer tras los entrenamientos de la pretemporada. El piloto balear dominó con cierta claridad el fin de semana y fue el que primero golpeó encima de la mesa.

El tetracampeón del mundo sigue dando muestras de una sensacional regularidad que le hacer ser un asiduo al podio. De hecho, acumula ya 99 cajones mundialistas en su carrera, por lo que de volver a subir en Texas, se convertiría en el octavo en hacerlo, en una lista que domina su compañero de equipo con un total de 178.

Precisamente, Il Dottore tratará de alargar las buenas sensaciones que transmitió en Catar, donde remontó hasta acabar en la segunda plaza, para dejar claro que vuelve a estar en la pelea por ganar carreras en MotoGP y por alcanzar su décimo entorchado mundial.