Vitoria. La Vuelta al País Vasco que arranca mañanas en Elgoibar es el termómetro de Euskaltel-Euskadi. "Es nuestro pequeño Tour", dice Igor González de Galdeano, mánager del conjunto vasco que echa una mirada a los dos meses de temporada recorridos, certifica lo objetivo, que el equipo no tiene ninguna victoria, y lo subjetivo, un papel secundario, inadvertido, en algunas de las pruebas, y reconoce que el hecho merece, al menos, una reflexión. Evoca los valores históricos de Euskaltel-Euskadi, el coraje y la entrega, les pide a sus corredores que lo recuerden y resta importancia al hecho de no haber logrado ganar aún porque confía en hacerlo en los próximos días. Para eso tiene a Samuel Sánchez, que defiende título. "Pero esta vez no somos candidatos a ganar. Samuel está bien, pero su objetivo es el Giro". Por eso, dice que correrán de otra manera, "sin asumir la responsabilidad". Es en ese escenario donde deben aparecer, confía el alavés, Antón, Gorka y Jon Izagirre, Landa? "Los jóvenes deben asumir un papel más protagonista porque el futuro del proyecto depende de ellos".
La Vuelta al País Vasco es siempre el primer termómetro de Euskaltel.
Somos el equipo de aquí, de casa y la Vuelta al País Vasco es nuestro pequeño Tour.
El equipo llega sin victorias.
Ninguna.
¿Lo esperaba?
No voy a negar que me ha hecho reflexionar. Este año se ha hablado de continuidad de un proyecto, pero ha habido muchos cambios. Yo por lo menos he partido de cero y no he tenido muchas facilidades. Los quebraderos de cabeza, más que deportivos, han sido estructurales, un ámbito en el que Euskaltel empresa ha estado al nivel y ha sacado el proyecto adelante. Gracias a Euskaltel, a nadie más, este equipo continúa. Quiero que eso quede claro. Pero la apuesta incluía reformas. Las hemos hecho en el staff o a nivel de infraestructura y eso ha hecho que empecemos prácticamente desde la nada, a lo que se le suma la llegada de corredores de fuera. Los cambios necesitan tiempo, pero la reflexión sobre los resultados del equipo es más profunda: ¿desde cuándo no gana un ciclista vasco una carrera World Tour?
Jon Izagirre, en el Giro.
Y de eso hace casi un año. Eso significa que tenemos una carencia muy grande y dependemos de muy pocos corredores. Casi diría uno, Samuel, que es una garantía.
Pese a los cambios, entonces, el problema sigue siendo el mismo: Euskaltel no tiene gol.
Eso y que tenemos que cambiar de cultura ciclista. Pero eso no basta con que yo lo diga, sino que tiene que ser algo que todos asumamos, partiendo de mí y hasta el último de los miembros de este equipo. Lo que estoy pidiendo es que cada uno asuma su responsabilidad.
¿No se hace ahora?
No es eso. Entre otras cosas, estoy hablando del ciclista vasco. Siempre he dicho que se le ha supervalorado sin hacer nada. De hecho, hay corredores muy valorados que solo han ganado una carrera en su trayectoria profesional. En el ciclismo que se está imponiendo ya no vale eso de que "qué bien ando", sino cosas más concretas y contables como cuántos puntos tienes, cuántas carreras ganas o el nivel competitivo para estar en el World Tour.
¿Le preocupa llegar a la Vuelta al País Vasco sin haber ganado?
No, porque todo el mundo está haciendo un trabajo importante, aunque de determinados ciclistas quiero más. Pero sin entrar en matices, hemos cogido una línea buena, la de una cultura diferente, la de buscar no solo que el ciclista firme un contrato profesional, sino que también lo sea. Los resultados van a llegar, de eso estoy seguro.
Lejos de no ganar y salvo excepciones, el equipo ha jugado un papel secundario en el arranque del año.
Bueno, al principio de temporada nunca hemos estado en posiciones tan altas en la clasificación del World Tour. Pero sí coincido en que el equipo ha perdido algo. Los valores de este proyecto están muy marcados desde hace tiempo. Son el esfuerzo, la competitividad y la entrega. Esas cosas nos han hecho diferentes y nos ha identificado con unos colores. Y quizás sea cierto que no hemos sido capaces de mostrar esos valores durante esas carreras.
¿Por alguna razón?
No lo creo. Tampoco considero que vaya a ser algo duradero. Somos conscientes de ello y vamos a volver a ser los de siempre en nada. Me he dado un plazo de seis meses para que este proyecto sea más fuerte que el anterior y seamos algo más de lo que hemos sido hasta ahora.
¿Qué le han aportado los ciclistas de fuera al proyecto? De momento, apenas se les ha visto.
No se les ha visto por varias cosas. Hemos tenido problemas de caídas como la de Vrecer, que se rompió la clavícula, y de visado con Tarik y Alexander, que ha estado sin poder salir de Rusia y sin poder entrenar por la nieve. No hemos tenido suerte, pero no hay que olvidar que lo primero que nos han dado los extranjeros es seguir en el World Tour. Estos ciclistas están fichados para que los vascos estén en la primera liga. El resultado es que hemos hecho el mejor equipo posible para País Vasco y todos son vascos. Hay gente que dice que esto ha cambiado, pero no estoy de acuerdo. Lo que quiero de los extranjeros es que suplan las debilidades que hemos tenido siempre y que con ello, nuestros ciclistas, los vascos, puedan correr sin ningún problema las mejores carreras.
¿Siente que el equipo ha perdido peso en la sociedad vasca?
Lo que veo realmente es que la gente está sufriendo con la crisis y que le está costando disfrutar más de las cosas. En ese panorama, el deporte y otras cosas secundarias están perdiendo peso en la sociedad y en los medios de comunicación.
De otra manera: ¿ha cambiado la relación del equipo con la afición?
El equipo ha empezado de cero, estamos empezando a construir cosas y nos va a costar.
¿Qué recibimiento espera de la afición en la Vuelta al País Vasco?
El de siempre. Más allá de opiniones concretas que respeto, creo que la afición ha entendido la realidad de lo que ha pasado y el por qué de las cosas.
¿Cuánto de decisiva es la carrera para el equipo?
Es importante, pero no decisiva. Venimos con Samuel, pero su objetivo es el Giro y la Vuelta al País Vasco, una parada para seguir trabajando. Llega bien, porque esta carrera no acepta a ciclistas que no lo estén, pero no venimos como otros años a ganar. Ese es el titular de Contador o de Porte, pero no de Samuel. Él no es el favorito.
Pero sí el líder de Euskaltel.
Correrá como tal, pero tendremos que buscar otra táctica para lograr victorias parciales y estar arriba en la general. No vamos a asumir responsabilidades porque eso se lo voy a pedir a Samuel en el Giro. De partida, no somos candidatos a ganar.
¿Cuál será el papel de Igor Antón o los Izagirre?
Esos son los que tienen que tomar responsabilidades. Samuel es el líder, pero en este momento les toca dar a ellos un paso adelante. No pueden estar mirando a Samuel, esperando que él llegue y salve la temporada. Ellos son el futuro de este proyecto y tienen que ser capaces de salvarlo.
¿Pone en sus manos el destino del equipo?
El futuro es de los jóvenes.
¿De gente como Jon Izagirre?
Es el más completo. Es muy sereno, me gusta. Gorka también, aunque es más nervioso, distinto, y ganador.
¿A Antón no le ve luchando por el triunfo?
Llega bien. Lo que les pido a todos es que respondan de una vez a lo que se espera de ellos. Ya no vale la autocomplacencia. Igor está haciendo las cosas muy bien, pero le falta apretarse un poco más, exigirse. Él es consciente y confío en que de aquí a Romandía recuperaremos al Igor que estoy deseando volver a ver.
¿Cuál sería un resultado desastroso en la Vuelta al País Vasco?
Que se cayese Samuel y me condicionase el Giro de Italia. Pero no espero un resultado desastroso.
¿Teme que llegue el día en el que falle Samuel?
Él no es infinito, pero le gusta mucho esto, disfruta. Con la edad le costará más, pero yo espero un Samuel con 36-37 años a un grandísimo nivel. Aunque insisto en que los jóvenes tienen que llegar y dar motivos para que este proyecto siga mereciendo la pena. País Vasco es su primera oportunidad, y la siguiente será el Tour, donde voy a llevarles para que demuestren que valen, que valemos.
¿De quiénes habla?
De Jon y Gorka Izagirre, de Sicard, de Igor, de Nieve, de Lobato... O Landa, que aunque no irá al Tour, tendrá libertad para demostrar cosas en otras carreras.
¿En alguno de ellos ve el relevo de Samuel?
De Samuel es difícil, pero en Jon Izagirre veo un ciclista sólido.
¿Qué le faltaría?
Tener mucha más ambición.
Lo de la autocomplacencia del ciclista vasco, claro.
Pero eso se va a acabar. Ya no valen las palmaditas en la espalda, lo de ando bien. El ciclismo actual pide corredores competitivos y resultados. Si no buscamos eso, estaremos abocados a que los ciclistas vascos acaben en otros equipos, pero en una segunda fila.