Duración: 50:29 minutos de juego; 17:51 de juego real.

Saques: 1 de Berasaluze VIII.

Pelotazos: 362 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 2 de Titín III, 15 de Berasaluze VIII y 4 de Albisu.

Errores: 1 de Titín III, 1 de Merino II, 3 de Berasaluze VIII y 4 de Albisu.

Marcador: 1-1, 2-4, 2-5, 3-5, 3-6, 4-12, 5-13, 6-16, 6-17, 8-21 y 9-22.

Botilleros: Ejercieron de botilleros Joaquín Plaza, con Titín III y David Merino, y José Ángel Balanza, Gorostiza, con Pablo Berasaluze y Jon Ander Albisu.

Incidencias: Alrededor de 700 personas en el frontón Bizkaia para presenciar el duelo que cerraba la séptima jornada del Parejas de Primera.

bilbao. Perfectos. No queda otra definición para Pablo Berasaluze y Jon Ander Albisu en su encuentro de ayer ante Titín III y David Merino, quienes cedieron de forma irremisible, casi sin aparecer por el frontón, ante dos rivales de enjundia, que vienen de menos a más y ya se encuentran peleando por colarse en el grupo de dúos en cabeza del Parejas. Y es que lo de ayer del mago de Berriz y el bulldozer de Ataun fue un auténtico espectáculo, un despliegue genial y un remate imperial, por parte de ambos, pero sobre todo de un rumboso Pablo, tan chisposo e ilusionante como en sus mejores jornadas. Mas su compañero también sonó como un cañón, como un volcán en erupción, con dos manos preciosas que regalaron bastante menos de lo que aportaron, en una versión engrasada de ambos, genéticamente preparados para formar un dúo letal. En sus manos apenas hubo partido, porque a Titín y a Merino II no les salió nada, pero tampoco tuvieron oportunidad de enredar ni de morder. Porque las dentelladas de un Pablo en vena eran hachazos al esternón de una pareja que venía con la moral por las nubes y acabó derramada por el suelo, derrochada para tratar de contener a dos pelotaris tan huracanados como necesitados.

Fue Berasaluze un mariscal. Comandando desde vanguardia un choque que se presumía loco y volcánico, dada la categoría de los puntilleros, muy de la cuerda del espectáculo puro y duro, del remate y la velocidad; Pablo arrasó sin contemplaciones con el delantero de Tricio. Augusto, ampliamente desdibujado, no fue un genio en la batalla a corta distancia. Merced a su falta de chispa, el mago berriztarra ejerció de bisturí para arrollar sin contemplaciones a su contrincante. Titín no estuvo; sí que intentó cosas, pero apenas tuvo pelota y cuando la tuvo, fue Pablo artificiero de éxito.

Atrás, por otro lado, no hubo ni color. Albisu atropelló en todo momento a David, al que no le salía la pelota de la izquierda, lo que dejaba huecos a un Berasaluze muy entonado. Imperiales pasaron del 3-5 al 3-12 y, posteriormente, del 5-12 al 7-20. Para acabar los de Asegarce encontrándose con todo el pescado vendido de modo grandilocuente. Abonado al blitzkrieg, Berasaluze resucitó su vena rematadora en el mejor momento del torneo; tal y como hizo Albisu, arreglando el punto de mira de sus dos bazookas.

Lazkano y Larretxea ganan Por otro lado, Lazkano y Larretxea se llevaron ayer la txapela en el torneo de San Blas de trinkete en Abadiño. Los de Iparralde dominaron en un duelo emocionantísimo a Waltary y Ugarte y se metieron la final en el bolsillo en un último tanto de infarto. Acabaron 40-39 frente al machete cubano y el zaguero vizcaíno, que pusieron mucha pimienta al tema.