MADRID. "Saber que puedes ir al Tour te da tranquilidad porque no saberlo supone que a la hora de hacer una programación no puedes hacerla bien al cien por cien. Te organizas pensando que vas a ir pero te arriesgas a que si no vas desaprovechas otras oportunidades. Además, la licencia te da la seguridad de 'sponsors'", indicó el madrileño en declaraciones al programa 'El partido de las 12' de la Cadena COPE, recogidas por Europa Press.

El de Pinto reconoció que si no obtenía la licencia no podía garantizar su presencia en la ronda gala. "Cuando dije eso hablaba a nivel deportivo porque cualquier persona que sepa cuál es la preparación de un Tour lo entiende. Ya mismo estoy haciendo la base del Tour porque tenemos que hacer una programación perfecta para ir a por la victoria, no para asegurarte ganarlo, sino para pelearlo. Por eso dije que si no tenía garantizada la presencia te tocaría plantearme si ir o no", alegó.

El Tour es uno de los principales objetivos para 2013. "Aún no puedo decir que lo vaya a correr porque nunca se sabe pero sí está en el horizonte. En cuanto al resto, no dependerá de lo que haga en el Tour sino en cómo vaya la temporada. En el Tour, a día de hoy sí estaré, pero no se puede garantizar", sentenció.

Contador es el vigente campeón de la Vuelta a España. "Fue espectacular. He disfrutado como nunca en la carrera, el público se volcó con nosotros y fue estupendo. Habrá que ver si este año estoy", dijo.

En cuanto a sus rivales en las grandes vueltas, el madrileño tiene a todos en cuenta. "Si tuviera que decir un corredor en este momento sería Froome, por cómo ha evolucionado y por el potencial que tiene en subida y en contrarreloj. Andy Schleck tiene una clase impresionante y la gente ya se ha olvidado de él pero si se prepara tres meses para el Tour lo disputará", argumentó.

EL DOPAJE, MUY PRESENTE.

El madrileño habló sobre sus malos momentos, cuando fue sancionado por dopaje. "Es algo que voy a recordar siempre y no me viene mal hacerlo. Hay que valorar todo pero ahora estoy centrado en el presente y el futuro y eso ha quedado atrás, pero olvidado no está", sentenció.

Tras una dura lucha en los tribunales, la UCI le ganó la partida. "Me resultaba imposible no recurrirlo porque cuando estás cien por cien seguro de que no has hecho nada lo tienes que hacer. A nivel económico ha sido una inversión alta pero lo volvería a hacer ahora", aseguró.

Otro caso de dopaje con mucha repercusión ha sido el de Lance Armstrong. "Te sorprende la cantidad de cosas que han salido pero yo me he intentado mantener al margen. No quería estar pendiente todos los días de todo porque es algo que te entristece mucho porque es un corredor que ha sido referencia para ti", dijo.

El americano prefirió no alegar la sanción que le impusieron. "Cada uno es libre de coger la dirección que crea conveniente y cada caso es de una forma", expuso el madrileño.

El dopaje en el ciclismo ha cambiado en los últimos años. "Es imposible que esté más controlado y no me cabe en la cabeza que haya corredores que corran las principales carreras haciendo cualquier cosa. Lo de Armstrong es una cosa que pasó hace una década y ha salido todo ahora a la luz. Está claro que la cosa va a cambiar de la noche a la mañana", finalizó.