Madrid. La selección española femenina de balonmano buscará hoy (18.15 horas) ante Hungría su tercera victoria en la fase de grupos del Campeonato de Europa que se está disputando en Serbia que le permita además pasar con el pleno de puntos a la segunda fase.
Después de ganar a Alemania y de deshacerse de su más peligroso rival, Croacia, las de Jorge Dueñas necesitan batir a las magiares para clasificarse con cuatro puntos y quedarse cerca de poder acceder a las semifinales del torneo continental.
La tarea no será sencilla, por la igualdad demostrada por todas las selecciones en este Grupo C, aunque el actual bronce olímpico y mundial ha demostrado estar un peldaño por encima del resto, sobre todo en lo que se refiere al nivel defensivo.
Y es que las españolas han vuelto a hacer de su solidez atrás y de su constante pelea las señas de identidad que las están haciendo brillar de momento en este Europeo, donde aspiran a volver a pelear por los metales. En dos partidos, sólo han permitido 41 goles, mostrándose muy fuertes en los minutos decisivos tanto ante las alemanas como ante las croatas, a las que sólo permitieron dos goles en los últimos 15 minutos.
En ataque, siguen los problemas de antaño, con excesivas pérdidas, y notando la baja de Macarena Aguilar, ausente ante Croacia tras su brillante partido en el estreno por culpa de una metatarsalgia, aunque evitó cualquier fractura, por lo que el seleccionador deberá administrar bien sus minutos, únicamente en ataque.
Y es que los percances físicos están alterando hasta el momento el buen devenir de la selección nacional en este torneo, con Verónica Cuadrado y Marta Mangué, también entre las afectadas, aunque la pivote, baja ante las croatas, volverá a estar lista para medirse a las húngaras.
Hungría se juega buena parte de sus opciones para aspirar a algo en este campeonato. Al igual que Alemania, se perdió los Juegos y lleva desde 2005 sin saborear un podio en una gran cita internacional, aunque de su calidad todo se puede esperar.