OSASUNA Andrés Fernández, Damiá, Miguel Flaño, Arribas, Nano, Timor (Oier, m. 75), Raoul Loe, Cejudo, Sisi, Lamah (Torres, m. 68); y Kike Sola (Manuel Onwu, m. 86).

MÁLAGA Caballero, Gámez, Weligton, Demichelis, Eliseu, Toulalan, Camacho, Portillo, Isco (Duda, m. 82), Joaquín; y Saviola, (Santacruz m. 70).

Árbitro Estrada Fernández (Comité Catalán). Mostró tarjetas amarillas a los locales Damiá, Sisi, Raoul y Arribas.

Estadio Reyno de Navarra ante 15.956 espectadores.

pamplona. Osasuna consiguió un merecido empate ante el Málaga que sin embargo no le sirve para salir del último puesto de la clasificación general después de la mejoría de juego mostrada. Los navarros pudieron conseguir la victoria por su trabajo, pero fueron incapaces de transformar en gol las oportunidades que tuvieron ante Caballero, mientras que el Málaga logró un punto gracias al buen trabajo de su portero en los minutos finales.

El primer tiempo comenzó con dos oportunidades de gol pero el árbitro Estrada Fernández anuló el de cabeza de Kike Sola por estimar un fuera de juego a instancias de su auxiliar y un minuto más tarde llegó la reacción visitante con un disparo raso de Portillo que Andrés Fernández desvió con la mano a saque de esquina. Mientras Osasuna buscaba el juego directo y le metía mucho ritmo al partido, el Málaga intentaba los pases interiores o los centros a la espalda de la defensa.

Tras el descanso, los locales salieron decididos a por el gol. Un centro de Lamah desde la banda izquierda lo remató de cabeza Kike Sola y obligó a intervenir a Caballero de manera decisiva evitando el gol y, poco después, un disparo de Cejudo raso desde fuera del área lo atrapó el meta visitante. La respuesta del Málaga llegó en un centro envenenado de Joaquín desde la derecha que no encontró rematador.

Los de Mendilibar lo intentaron una y otra vez ante un rival que esperaba su ocasión y con el paso de los minutos notaron el esfuerzo físico realizado. Con Santacruz por Saviola para dar más fuerza al ataque andalúz, y con unos minutos para los canteranos Torres y Oier, la mejor oportunidad del partido estuvo en las botas de Cejudo, que sólo ante Caballero no pudo superar al meta visitante a siete minutos del final.