Abu Dhabi. Dos victorias le faltan al alemán Sebastian Vettel para proclamarse por tercer año consecutivo campeón del mundo. Y tiene razones para confiar en el éxito, porque fue en Abu Dhabi donde logró su primer título mundial y es ese trazado uno de los que más incómodos le resultan a su gran rival, Fernando Alonso. Ante el panorama que se avecina y después de cuatro victorias consecutivas de Vettel, Ferrari intenta ahora infundir miedo a Red Bull de cara al Gran Premio del domingo. Lo hace, curiosamente, apelando a un éxito histórico del fútbol italiano. "Les dije a mis hombres: Los italianos no eran los más fuertes en el Mundial de 1982, pero ganaron el torneo", señaló el jefe de equipo de la escudería, Stefano Domenicali.

El italiano no se esconde a la hora de elegir al mejor piloto de la parrilla: "Tenemos el lujo de poseer al número uno". Podrá serlo, pero Alonso no guarda precisamente buenos recuerdos de Abu Dhabi. Hace dos años tuvo que contemplar con un rostro compungido, sudado y deprimido cómo Vettel ganaba su primer título de campeón. A ello se suma que el coche de Ferrari sigue siendo inferior al de Red Bull. Alonso está inquieto, aunque se muestre siempre combativo, y convencido por completo de que esta vez sí terminará como número uno. El diario La Stampa aseguró que hubo una disputa entre Alonso y el director técnico de Ferrari, Pat Fry, algo que Domenicali desmintió. El panorama en Red Bull es diferente: Ve-ttel ganó los últimos cuatro Grandes Premios y dominó tres de ellos de principio a fin. El alemán lleva una ventaja de 13 puntos sobre el asturiano, que no conoce la victoria en los últimos tres meses.

Y Abu Dhabi es hasta ahora tierra de Vettel. Tres carreras, dos veces pole y dos victorias, una de ellas con el título mundial. "No lo olvidaré jamás", subrayó Vettel en vísperas de la que será su carrera número 99. El domingo, el semáforo se apagará al atardecer y el vencedor festejará el triunfo a la luz de innumerables focos dos horas escasas después. "Es algo único e impresionante", describió Vettel sobre el fabuloso escenario en el desierto. De ganar de nuevo en Abu Dhabi, y en Austin dos semanas después, el germano sería de nuevo campeón y entraría junto con el argentino Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher en la lista de ganadores de tres Mundiales de forma consecutiva.

Curiosamente, McLaren no cree que la ventaja de Red Bull sea decisiva. Considera que las diferentes características de los tres circuitos que quedan podrían ser suficientes para borrar la ventaja de Vettel. El director deportivo Sam Michael lo explica así: "Las prestaciones de un coche pueden variar un par de décimas de un circuito a otro. No tiene que ver con las evoluciones que se metan en el monoplaza", asegura, al contrario de lo que opinan otros pilotos e ingenieros. Con todo, al tiempo que Sauber confirmó el fichaje para 2013 del alemán Nico Hulkenberg, de Force India; y mientras Toro Rosso seguirá con Ricciardo y Vergne; Vettel pisa ya su tierra prometida.

Domenicali apela al Mundial de fútbol de 1982: "Italia no era la más fuerte, pero ganó"

Sauber hace oficial el fichaje de Hulkenberg y Toro Rosso confirma a Ricciardo y Vergne