Vitoria. con 7 años, en su primera carrera, Imanol Estévez fue el último en atravesar la línea de meta. No fue por falta de ambición, ni por terminar el recorrido con desventaja sobre sus adversarios. A diez metros de la meta, el joven gasteiztarra vio a su madre y a su abuela entre los espectadores y no dudó en pedalear hacia ellas olvidándose por completo de la carrera. Hoy en día es imposible que Imanol se monte en la bicicleta sin quitarse de la cabeza la posibilidad de llegar a meta en primera posición. Con 19 años, el corredor de Naturgas, se ha convertido en el primer ciclista que consigue ganar el Torneo Lehendakari en su primer año en la categoría. A pesar de su competitividad, todavía va asimilando poco a poco su logro: "La verdad es que a principios de año esto era impensable. Llegué a la categoría con el rol de trabajar para el equipo y en agosto, después de la victoria en Lemoiz, fui pensando un poco más en la general del torneo. Me metí a última hora entre los dos corredores que habían liderado la general todo el año y en la última carrera conseguí llevarme el torneo".
Imanol Estévez se ha hecho con el título tras recortar la importante desventaja que tenía respecto a Aitor González, de Debabarrena. El 13 de agosto consiguió su única victoria del Torneo en Lemoiz, tras la que empezó a creer en sus posibilidades: "La siguiente carrera era en Busturia, fue dura porque acababa en alto y conseguí ganar la montaña y terminar tercero. Con eso la moral subió muchísimo. En Elgoibar le recorté otros seis puntos y me puse a 19. La gente ya empezó a hablar de que sí podía tener oportunidades. En Bermeo me quedé ya a seis puntos y en Bergara me quedé a solo un punto del líder". Fue en la última prueba, la de Oñati, en la que Estévez consiguió saltar a lo más alto de la clasificación: "Aunque hice noveno, fue la carrera que más me ha gustado. Hubo una escapada y en teoría yo tenía que guardar hasta el último repecho, pero en Kanpazar atacó Rubén Fernández, del Caja Rural. No quería que se metiese más gente por medio y salí a por él. Aitor intentó salir, pero se quedó. Conseguí entrar con Rubén en la fuga y tiramos a muerte. Nos pegamos una buena paliza Jon y yo tirando, pero atrás se puso a trabajar Bidelan y nos engancharon otra vez. Ahí el equipo estuvo otra vez increíble porque yo me había pegado una buena paliza. En cuanto conseguí coronar con los de delante, vi que Aitor no se había metido y otra vez me puse a tirar a muerte. La victoria de etapa me daba igual, solo quería llegar en ese grupo. En la línea de meta me empezaron a pasar por todos lados y fui noveno".
Su título le ha convertido en una de las perlas de la Fundación Euskadi, pero el corredor alavés no quiere hacer las cuentas de la lechera y va paso a paso: "No pienso en profesionales. Solo pienso en la temporada que viene, en hacerlo lo mejor posible. Cuando llegue el momento, sí que me gustaría pasar a profesionales y hacer de mi deporte y de mi ilusión, mi trabajo".
el euskaldun, para abasolo Por otro lado, el Torneo Euskaldun ha sido este año para Borja Abasolo. El corredor de Matiena, enrolado en el Azysa, ha conseguido un título que no lo ganaba un vasco desde 2006. "Espero que me abra las puertas del profesionalismo", explica el ciclista de 23 años, "demuestra que he sido el más regular en todo el año. Espero que en la Fundación Euskadi, que se supone que quiere tener los mejores vascos en su equipo, lo vean y se pueda llegar a algún acuerdo para el año que viene".
A pesar de que la victoria de Abasolo se veía venir desde hace meses, el vizcaíno no lo veía como un objetivo a principio de temporada: "Cuando hablé con el director del equipo, me dijo que podía ganar el Torneo Euskaldun, pero la verdad es que yo lo veía muy complicado. Hay muchos corredores que van muy bien. Pero en la segunda carrera ya me puse líder. Fuimos poco a poco intentando mantener el maillot. En agosto, sí que vi que podía ganarlo y ya me centré en darlo todo para no perderlo en las últimas carreras".
Lucir el maillot de líder durante tanto tiempo ha hecho que Borja Abasolo termine la temporada con la espinita clavada de no haber podido vencer en ninguna carrera: "No es que no haya ganado por fuerzas. Siempre he sido un corredor que he buscado las escapadas y las victorias desde lejos, pero este año al ir todas las carreras de líder, esa opción estaba prácticamente descartada".
El joven de Matiena, al que le robaron su primera bicicleta cuando iba a Durango a estar con sus amigos, se siente orgulloso de su logro de esta temporada. Espera que este triunfo no pase desapercibido y le abra alguna puerta para seguir apostando por su sueño, por verse compitiendo entre los profesionales de la carretera.
aficionados triunfadores de la temporada
"A principios de año esto era impensable, llegué con la idea de ayudar al equipo"
imanol estévez
Ciclista de Naturgas
"Espero que esto me abra las puetras del profesionalismo, he sido el más regular"
borja abásolo
Ciclista de Azysa
Borja Abasolo espera que este título sirva para llamar la atención de los clubes importantes. Foto: iban gorriti