vitoria. Un día después de haber dado la gran sorpresa al anunciar su retirada nada más concluir el Abierto de Estados Unidos, Andy Roddick, el exnúmero uno del mundo, saltó al cemento de la pista central Arthur Ashe Stadium para reencontrarse con su mejor versión y lograr el pase a la tercera ronda. De momento, Roddick no jugó su último partido sino que recuperó su mejor tenis y superó sin problemas por 6-3, 6-4 y 6-0 al australiano Bernard Tomic.

Además la quinta jornada del Abierto tuvo un cierre ideal para los jugadores estadounidenses después que el sustituto del saque letal que poseyó Roddick, John Isner, abrió la jornada con su triunfo ante el finlandés Jarkko Nieminen. La jornada también dejó los triunfos esperados de los grandes favoritos como son el serbio Novak Djokovic (2º cabeza de serie), el español David Ferrer (4º), el argentino Juan Martín del Potro (7º), el serbio Janko Tipsarevic (8º) y el francés Richard Gasquet (13º).

Roddick volvió a ser el de años atrás y mostró un juego brillante para barrer al joven australiano y pasar a la tercera ronda sin problemas, en la que tendrá la oportunidad de seguir siendo el auténtico A-Rod ganador. El público lo recibió como lo merecía. Era un día especial y se entregó por completo, con tribunas repletas y con voces de aliento en todo momento.

Roddick tampoco les defraudó y respondió con su mejor tenis en la hora y 27 minutos que necesitó para acabar con Tomic después de colocar trece aces y nada menos que 33 golpes ganadores. El exnúmero uno del mundo nunca tuvo dudas de su juego, ni tan siquiera en la segunda manga, cuando estuvo en apuros y la marcha del partido se le pudo complicar. Roddick superó la situación con autoridad y concluyó el partido de forma arrolladora y en sólo 21 minutos tras haber perdido cinco tantos. "Ha sido un momento muy especial, creo que el público fue el que me hizo sentir mejor que nunca y que mi tenis fuese casi perfecto", declaró.